Despiden a trabajadores que protestan por precarias condiciones y abusos, indica
Viernes 3 de junio de 2016, p. 35
En Ciudad Juárez, el problema de los trabajadores de las maquiladoras se recrudece porque además de los míseros salarios, la negativa de las empresas a inscribirlos en el Seguro Social y de que padecen condiciones de explotación, las compañías violan su derecho a la libre sindicalización, la mayoría tiene contratos colectivos de protección, están arreglados con gremios blancos o contratan de palabra
a los empleados.
En tanto, la Junta Local de Conciliación y Arbitraje (JLCA) invariablemente falla en contra de los trabajadores cuando demandan el registro de sindicatos independientes, denunció la Red de Solidaridad de la Maquila (RSM).
Es el caso de las empleadas de Lexmark, en el cual la junta rechazó dos veces por tecnicismos menores la petición de que se reconociera su sindicato independiente. Incluso este tribunal avaló que se despidiera a más de 120 trabajadoras que participaron en protestas en contra de las precarias condiciones laborales, acoso sexual
y estar sometidas a jornadas mayores a las 40 horas semanales y sin prestaciones, según planteó esta organización.
Afirmó que también protestaron por condiciones laborales similares, trabajadoras de Foxconn, Commescope y Eaton Corporation, entre otras.
En tanto, 56 obreras de Lexmark de México levantaron el 10 de abril pasado el campamento que mantuvieron afuera de la empresa, luego de haber sido despedidas, precisamente por haber intentado la creación de un sindicato independiente, ante múltiples violaciones laborales
de que son objeto por la empresa. Ninguna de ellas fue reinstalada, se les entregaron sus liquidaciones.
La RSM también sostuvo que Lexmark, de capital estadunidense y que forma parte de un corporativo internacional de impresoras y software, incluso exigió a las obreras firmar un acuerdo de confidencialidad, antes de recibir sus liquidaciones. Ello no obstante que 32 gremios y organizaciones no gubernamentales firmaron una carta en la que se pedía la reinstalación de las empleadas y que se respetara su derecho a formar un sindicato independiente.
La organización detalló que desde mediados del año pasado, cientos de trabajadoras del referido corporativo y otros más de Ciudad Juárez, participaron en una serie de protestas por sus extendidas jornadas laborales, sus bajos salarios, la falta de prestaciones e incluso por el acoso que padecen. Ante ello, las empresas determinaron aplicar despidos masivos de participantes en esas marchas. Ahora, las mismas continuarán la lucha con la conformación de una asociación denominada Obreras Maquiladoras de Ciudad Juárez.
Esto es porque las maquiladoras son las reinas de los contratos de protección; quieren volver a prácticas como el pago por destajo y trabajo a domicilio, dijo.