Enfundada en el uniforme verde olivo de campaña del Ejército Mexicano y satisfecha de haber sido ascendida a cabo, la doble medallista olímpica, María del Rosario Espinoza, afirma que su principal arma para buscar el oro en Río 2016 es la experiencia.

La taekwondoísta participará por tercera vez en los Juegos Olímpicos. En Pekín 2008 ganó medalla de oro y en Londres 2012 la de bronce.

¿Mis rivales más difíciles? son 15 de las 16 que estamos en la competencia, dijo en entrevista con La Jornada, y agregó: La verdad es que no hay enemigo pequeño ni grande, todas somos iguales. Sobre todo por la magnitud que representa la justa. De principio a fin hay que estar concentradas y motivadas.

Después de recibir su ascenso de manos del secretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos, en las instalaciones de la Universidad del Ejército y Fuerza Aérea Mexicano, la sinaloense señaló que se inició en el arte marcial desde los cinco años y a los 15 se convirtió en atleta de alto rendimiento. Apenas un año después consiguió el campeonato panamericano juvenil en Río de Janeiro.

–¿Muchos esperaban que fueras la abanderada de la delegación mexicana en Río. Eso te deja insatisfecha?

–No, estoy tranquila con eso. Desde un principio estaba concentrada en lo que es mi competencia. Ahora hay que enfocarnos más todavía (Ella fue la abanderada en Londres 2012).

–Algunos atletas han manifestado su temor por el virus del Zika en Brasil, ¿qué opinas?

–Fui hace como tres meses a Brasil y no hubo ningún problema, así es que me quedo tranquila sobre ese tema.