Revisó los suscritos para el proyecto de calidad de combustibles
Martes 23 de febrero de 2016, p. 23
En los cinco contratos de obra suscritos por Pemex Refinación, encabezada por Miguel Tame Domínguez en septiembre de 2014 para desarrollar el Proyecto de Calidad de los Combustibles en su fase diésel para las refinerías Madero, Minatitlán, Salamanca, Salina Cruz y Tula, con una inversión total estimada en 2 mil 800 millones de dólares, no se garantizaron las mejores condiciones para el Estado, aseguró la Auditoría Superior de la Federación (ASF) en la revisión de la Cuenta Pública 2014.
El objetivo de estas obras era reducir en 97 por ciento el contenido de azufre en el diésel, al pasar de 500 a 15 partes por millón, para cumplir con la norma oficial mexicana NOM 086-Semarnat-Sener-SCFI-2005 sobre especificaciones de los combustibles fósiles para la protección ambiental.
En su dictamen emitido el 17 de diciembre de 2015, el órgano fiscalizador del Congreso estableció que los contratos no se adjudicaron a la mejor propuesta calificada técnica y económica. Ante estos resultados la ASF detectó recuperaciones probables por 233 millones 223 mil 600 mil pesos y recomendó aplicar siete promociones de responsabilidad administrativa sancionatoria.
Se celebraron cinco contratos de obra en dos fases, que iniciaron obras el 17 de septiembre de 2014 bajo la metodología de Libro Abierto Convertible a Precio Alzado (OBCE, por sus siglas en inglés), el cual consiste en dos etapas de ejecución: el desarrollo de la ingeniería de detalle y procura temprana de equipos de largo tiempo de entrega, y la construcción de las plantas. Sin embargo, en dicha normativa no se ubica la metodología aplicada ni existe normativa nacional que la regule.
Además, en el proceso de invitación de la refinería Ing. Antonio Dovalí Jaime, en Salina Cruz, Oaxaca, el contrato no se adjudicó a la propuesta mejor calificada técnica y económicamente, y que además era la proposición solvente más baja. Asimismo, se incumplió lo asentado en las bases de la invitación, afectando el principio de legalidad y certeza jurídica, por lo que la adjudicación del contrato a Fostger Wheeler USA Corporation, que ocupó el segundo lugar, no garantizó las mejores condiciones para el Estado.
Por las deficiencias en la adjudicación del contrato de la refinería en Salina Cruz, Oaxaca, tampoco se garantizaron las mejores condiciones para el Estado, en la adjudicación del contrato de la refinería General Lázaro Cárdenas, en Minatitlán, ya que se le asignó al que ocupó el segundo lugar en puntaje en lugar de adjudicarla a la propuesta del primer lugar, lo que implicó que se contratara la Fase I a un costo mayor en 58 millones 81 mil 300 pesos.
La ASF descubrió que derivado de que no se respetaron las bases de las invitaciones en la adjudicación de los contratos de las Refinerías Ing. Antonio Dovalí Jaime, en Salina Cruz, Oaxaca y General Lázaro Cárdenas, en Minatitlán, Veracruz, tampoco se garantizaron las mejores condiciones para el Estado, ya que se adjudicó el contrato para los trabajos de la refinería Miguel Hidalgo, en Tula de Allende, Hidalgo, a quien ocupó el cuarto lugar en puntaje (ACS/Dragados/Cobra) para la Fase I, en lugar de adjudicarla a la propuesta del tercer lugar, lo que implicó que se contratara la Fase I con un costo mayor en 37 millones 566 mil pesos.
De esta manera, en el fallo del proceso de invitación de la refinería Miguel Hidalgo, en Tula de Allende, Hidalgo, se formalizó el contrato sin acreditar la diferencia en más de 2 millones 59 mil 200 dólares, que equivale a 27 millones 295 mil 100 pesos de acuerdo con la cotización del dólar en aquella fecha.
La ASF documentó que en el fallo del proceso de invitación de la refinería Ing. Antonio Dovalí Jaime, en Salina Cruz, Oaxaca, se formalizó el contrato sin acreditar la diferencia en más de 28 millones 749 mil 800 dólares, que equivalen a 381 millones 81 mil 200 pesos.
Además, en el proceso de invitación de la refinería Miguel Hidalgo, en Tula de Allende, Hidalgo, se omitió ajustar los sobrecostos de la propuesta a quien se le adjudicó el contrato que ocupó el cuarto lugar en la evaluación de las propuestas, con los sobrecostos del que ocupó el tercer lugar en un monto menor en 42 millones 523 mil 100 pesos.
Adicionalmente, existe discrepancia en lo estipulado en los cinco contratos, ya que mientras en el numeral 6.1.1, fracción II, Gastos Reembolsables se pactó que éstos se pagarán con el sobrecosto de la contratista, en el anexo 45 de los contratos se señaló que dichos gastos se pagarán a costo directo, sin incluir el sobrecosto de la contratista.
En las bases de invitación de las cinco refinerías se detectaron inconsistencias que generaron imprecisiones al afectar los sobrecostos de las propuestas en la Fase I y Fase II.