La Paz.

El presidente boliviano, Evo Morales, afirmó este lunes tener pruebas de una presunta conspiración ejecutada por el gobierno de Estados Unidos contra Bolivia para confundir a la población con miras al referendo constitucional del próximo domingo en el que se decidirá la posibilidad de que el mandatario pueda postularse a una nueva relección.

Morales, el primer presidente indígena de Bolivia, aseguró en entrevista con una radiodifusora local, que cuenta con toda la información que demuestra la injerencia estadunidense contra su gobierno.

El próximo 21 de febrero se realizará en Bolivia el referendo constitucional para la aprobación o rechazo de la reforma al artículo 168 de la Constitución, con el fin de permitir al presidente Morales y al vicepresidente Álvaro García Linera postularse a una nueva relección para el periodo 2020-25.

Tenemos información de que la conspiración de afuera es de Estados Unidos, y no vamos a perdonar la conspiración. No la aceptamos, me están llegando documentos de cómo enseñan a los cocaleros a hacer inteligencia para hacer un seguimiento al (presidente) Evo, estamos informados, subrayó.

Morales citó como ejemplos los encuentros que sostuvieron con la embajada de Estados Unidos el ex agente de inteligencia y ahora periodista Carlos Valverde, y el ex legislador Manuel Suárez, del opositor Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR).

Vamos a hacer respetar la dignidad, la soberanía económica, política de Bolivia, no lo duden, recalcó el mandatario boliviano.

El periodista Valverde dijo el pasado 3 de febrero que Morales mantuvo una relación sentimental con Gabriela Zapata, vinculada a una empresa con la cual el gobierno firmó contratos, en lo que consideró un presunto tráfico de influencias.

Según Morales, esos ataques tienen como objetivo afectar al oficialismo en el referendo constitucional del 21 de febrero, y resaltó que la denuncia forma parte de una conspiración externa.

El jefe de Estado recordó que Suárez, cuando era diputado del MNR, fue el autor intelectual de su expulsión del Congreso en 2002.

Agregó que existe información de que el consejero económico del país del norte sostiene reuniones con opositores en la ciudad de El Alto, aledaña a La Paz.

Encuestas vaticinaron el pasado fin de semana la posibilidad de que Morales, en el poder desde 2006, pierda por primera vez en las urnas el próximo domingo.

Sin embargo, Morales dijo este lunes sentirse confiado en la victoria del sí el próximo domingo pues, aseguró, no será abandonado por las organizaciones sociales con las cuales ha mantenido durante su mandato una gran relación que garantiza la estabilidad social en Bolivia, lo cual derivó también en desarrollo económico.

Morales asumió la presidencia el 22 de enero de 2006, tras ganar con 54 por ciento de los votos.