El Partido Acción Nacional (PAN) informó que impulsa un mando policial mixto porque cree en el principio de subsidiariedad y en los controles democráticos, lo cual garantiza la intervención de una policía de nivel superior en el caso de los estados y municipios que sea determinada por un órgano técnico específico.

El líder nacional del blanquiazul, Ricardo Anaya Cortés, se refirió en un comunicado a la propuesta de mando único policial y planteó que la intervención en las funciones de las policías municipales únicamente se justifica en casos de infiltración del crimen organizado, falta de preparación y certificación de competencias.

Explicó que puede haber tantas policías municipales fuertes, capacitadas y sólidas como sean posibles, y tanta intervención de las policías estatales y federal como sea necesaria. Esa intromisión tendrá que ser definida por un órgano técnico facultado para ello y no por un gobernador o por la Secretaría de Gobernación.

La iniciativa panista tiene dos principios: subsidiariedad donde sea posible, que haya policía municipal; donde esté infiltrada por el crimen organizado, que intervenga la policía estatal o, en su caso, la federal. También debe haber controles externos, con un órgano que con criterios técnicos determine cuándo procede esa intervención.

Reconoció que hay terribles experiencias de policías municipales infiltradas por el crimen organizado, así como de estatales y federales, por lo que la solución definitivamente no es desaparecer a las municipales. Basta comparar la policía municipal de Querétaro o León con la policía estatal de Veracruz. La premisa de que las corporaciones estatales son mejores que las municipales, en este caso, no aplica en lo absoluto.

Ejemplificó: en Veracruz hay mando único en buena parte del estado, pero la situación es un verdadero desastre, con policías estatales involucrados en varios crímenes, entre ellos la reciente desaparición de cinco jóvenes en Tierra Blanca.