La previsión de crecimiento de la economía mexicana este año fue revisada a la baja, de 2.8 a 2.7 por ciento, por analistas del sector privado nacional y extranjero que participaron en la primera encuesta de expectativas económicas realizada en 2016 por el Banco de México (BdeM). Los especialistas anticiparon una mayor depreciación del peso frente al dólar, así como una inflación menor a la prevista.

El crecimiento de 2016 presenta mayores riesgos a la baja que el año anterior, asociado a un menor consumo que el registrado en 2015, comentó Dolores M. Ramón Correa, analista de Ve por Más, al comentar sobre la encuesta que elabora cada mes el banco central entre analistas privados.

En la encuesta de diciembre, los analistas habían mantenido sin cambio su previsión de crecimiento para 2016.

El tipo de cambio para el cierre de este año se ubicará en 17.55 pesos por dólar, lo que implicará una depreciación mayor a la prevista a finales de 2015, cuando los especialistas consultados por el banco central anticipaban una cotización de 16.67 pesos por unidad de la divisa estadunidense, de acuerdo con la encuesta. Mientras, la inflación este año será de 3.1 por ciento, nivel menor al previsto en la encuesta del mes anterior, que fue de 3.38 por ciento.

A menor crecimiento también se espera menor generación de empleo. Este año serían incorporados 667 mil trabajadores al IMSS, 28 mil menos que los previstos en la encuesta de diciembre.

La debilidad del mercado externo y la economía mundial, así como la inestabilidad financiera internacional y el bajo precio del petróleo fueron identificados por los analistas como los tres principales factores que podrían obstaculizar el crecimiento económico de México. La inseguridad pública y la incertidumbre cambiaria se ubicaron en el cuarto y quinto lugares, respectivamente.

La encuesta fue levantada por el Banco de México entre el 21 y el 28 de enero; fueron consultados 34 grupos de análisis y consultoría económica del sector privado nacional y extranjero.

El recorte de la expectativa de crecimiento para este año, observado en la primera encuesta del BdeM de 2016, obedeció a que el Instituto Nacional de Estadística y Geografía dio a conocer la semana pasada información preliminar en el sentido de que el producto interno bruto avanzó 2.5 por ciento anual en 2015.

El pronóstico de 2.7 por ciento todavía es optimista, comentó la analista de Ve por Más. Apuntó que se advierten mayores riesgos en el dinamismo del consumo a lo largo de 2016, comparado con el desempeño que tuvo el año anterior.

La hipótesis de un desempeño del consumo inferior al de 2015, dijo, se ve sustentada en cuatro factores: el recorte de presupuesto gubernamental en 2016, que conllevará una menor generación de empleos relacionados con el sector público y de construcción; alto endeudamiento de la población en 2015, a pesar de que la cartera vencida se mantiene en niveles sanos; el indicador de confianza del consumidor presenta una ligera desaceleración, lo cual se debe a la preocupación que está generando la depreciación del tipo de cambio, y porque a principios del cuarto trimestre de 2015 indicadores adelantados mostraron deterioros en las perspectivas del sector servicios. Además, el sector industrial en México sigue marcando una acentuada debilidad, añadió.