Santiago.

Cada latinoamericano desperdicia 223 kilogramos (kg) de alimentos por año, equivalentes a unas 127 toneladas, cantidad que los países se comprometieron a reducir a la mitad al año 2030, informó este martes la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

En América Latina y el Caribe las pérdidas y desperdicios de alimentos per cápita alcanzan los 223 kg al año, cifra que se quiere bajar a la mitad a través de una nueva Alianza Regional para la Reducción de Pérdidas y Desperdicios de Alimentos”, indicó el organismo, cuya sede regional está en Santiago.

Con los alimentos que se desperdician sólo a nivel de la venta al detalle se podrían satisfacer las necesidades alimenticias de todas las personas que actualmente sufren hambre en nuestra región, explicó Raúl Benítez, representante regional de la FAO, citado en el comunicado de prensa.

De acuerdo con datos de la FAO, la proporción de personas que padecen hambre en América Latina y el Caribe se redujo de 14.7 por ciento a 5.5 por ciento desde 1990, equivalentes a unas 34.3 millones de habitantes.

Erradicar el hambre requiere que eliminemos los desperdicios de alimentos y transitemos hacia un futuro donde los sistemas agroalimentarios sean sostenibles, inclusivos y eficientes, agregó Benítez. De acuerdo con la FAO, los alimentos se pierden durante la producción, poscosecha, almacenamiento y transporte; y se desperdician durante la comercialización y el consumo, por quienes deciden desecharlos cuando aún tienen valor.

Del total de pérdidas, 30 por ciento corresponde a cereales, 20 por ciento a productos lácteos, 35 por ciento a pescado y 45 por ciento a frutas y hortalizas.

Dentro de la estrategia para reducir el número de alimentos desperdiciados se acordó formular políticas públicas sobre este tema.