Opinión
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Ciudad Perdida

Nueva lucha de la UACM

Autonomía presupuestaria en riesgo

D

espués del muy vergonzoso episodio de la señora María Esther Orozco en la Universidad Autónoma de la Ciudad de México, ahora, en la otra cara de la moneda, su actual rector, el doctor Hugo Aboites, decidió iniciar una protesta que lo llevará, junto con sus alumnos, a la calles de la capital del país, por el recorte presupuestal que se aplicó a esa institución educativa, que corresponde a 11 por ciento del presupuesto proyectado para este año.

Por alguna razón inexplicable, la UACM parece no estar dentro de las prioridades de los mandatarios del Distrito Federal. Por estos meses, pero de 2010, la universidad se vio inmersa en otro problema presupuestal que denunció el entonces rector, Manuel Pérez Rocha.

Hace cinco años, el gobierno de la ciudad trató de manipular los fondos federales asignados a la casa de estudios y sólo completó el presupuesto con las finanzas locales. Ahora, en la administración de Miguel Ángel Mancera, se ha tratado de hacer algo muy parecido, y eso ha provocado que el alumnado se irrite y proponga la protesta callejera como primera medida. Protesta que, como dijimos, será apoyada por el rector de esa universidad.

Para poner las cosas en claro, vale decir que los dineros asignados tanto por la Federación como por el gobierno local a la UACM ascienden a mil 209 millones de pesos. De ese total, el gobierno federal aportará 150 millones, y con ello la cifra citada estaría completa. Pero las cosas no son así, no para el gobierno central de la ciudad de México.

Hasta donde nos han dicho, el presupuesto que pretende entregar la administración de Mancera a la UACM es de sólo mil 59 millones, es decir, le quitan 150 millones al presupuesto original, lo que pega directamente en los proyectos de obras que requiere esa casa de estudios.

Hoy, a eso de las 18 horas, habrá una reunión de las autoridades universitarias y las del Gobierno del DF, y se adelantó que la propuesta gubernamental será que los dineros faltantes los invertirá directamente el gobierno en las obras que requiera la casa de estudios, pero también se conoció que la respuesta de los universitarios será un no rotundo.

El argumento de los estudiantes es que si bien este año podrían resultar bien las cosas, para el próximo el gobierno local volvería a ejercer el presupuesto de la UACM, y ello traería consigo un mal precedente para la autonomía de esa casa de estudios.

La administración de Mancera debería tener en cuenta que permitir que sean los propios universitarios quienes destinen, para lo que más les convenga, el presupuesto que se les ha asignado, sin mayores manipuleos, es permitir que sea esa institución, en su conjunto, la responsable de su futuro, además de que, visto de lejos, parece un pleito sin sentido para el gobierno de la capital.

Y habrá que recordar siempre que más vale un joven en el aula que en la calle. Eso por si en algún lugar se perdió la perspectiva. ¡Aguas!

De pasadita

Vamos a ver quién entiende. Por un lado nos dicen que acortar las vías a la circulación de automotores, como en el caso del Centro Histórico o muchas calles angostadas con el propósito de ofrecerlas al ciclismo, es una forma de desalentar el uso de los automóviles en la ciudad, y por otro, se construyen pasos a desnivel y túneles que harán que la circulación de los coches sea más rápida. ¿Qué mente desquiciada es la que aconseja tal esquizofrenia?