El mayor daño lo tuvo la empresa de electricidad: 50,333 millones
Jueves 6 de noviembre de 2014, p. 27
Las dos principales empresas productivas del Estado, Pemex y CFE, registraron pérdidas por más de 65 mil 500 millones de pesos hasta agosto de este año, por mermas en los combustibles, robo y deficiencias técnicas.
Durante su participación en The Mexico Summit, the road to competitiveness (Reunión México, el camino de la campetitividad), los directores de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), Enrique Ochoa Reza, y de Petróleos Mexicanos (Pemex), Emilio Lozoya Austin, reconocieron los daños económicos que para las finanzas de las empresas representa particularmente el robo de energía y combustibles, respectivamente, a grado tal que esta misma semana, jueves o viernes, la Cámara de Diputados aprobaría una reforma legal para endurecer las penas a quienes roban combustibles.
Los mayores daños causados por el robo de energía los presentó la CFE durante 2013, la cual perdió 50 mil 333 millones de pesos por pérdida o robo, dijo el director de la institución, Ochoa Reza. Refirió que el volumen se observa todavía más complicado si se compara con las estadísticas de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), cuyos miembros registran pérdidas de 6 por ciento, en promedio, mientras en México se eleva a 15 por ciento de la energía transportada.
Por su lado, los robos reportados por Pemex entre enero y agosto de este año suman el equivalente a 7.5 millones de barriles de crudo, que en términos económicos se calculan en 15 mil 300 millones de pesos.
“El robo de hidrocarburos es uno de los peores robos que se le puede hacer al país, porque son escuelas que se dejan de construir, hospitales, carreteras; es un robo directo a los impuestos de la nación a través de la producción petrolera, ya sea en crudo o productos refinados. No es un tema fácil de aproximar por la carga jurídica, y es un tema que hoy ya está en la Cámara de Diputados y espero que mañana o pasado sea discutida en el pleno y se apruebe una ley que incrementa sustancialmente tanto las penas como los instrumentos que tiene el Estado, Pemex, para combatir este delito.
Pongo un ejemplo: si a un presunto delincuente se le detiene con unos bidones de gasolina o diesel, el comprobar que son robados no es trivial. Lo que está haciendo Pemex para tener certeza y pruebas jurídicas de que el producto es robado, está instalando tecnología de punta en todos los depósitos y los ductos para tener una prueba contundente ante los tribunales de que el producto fue sustraído en determinado momento de la cadena de valor
, adelantó Lozoya Austin.
El robo de combustibles, reconoció, nos ha causado un daño patrimonial severo
. Pemex, precisó, es una empresa de exploración, producción y procesamiento de producto, no es una empresa de seguridad y tampoco somos un Ministerio Público
. Por eso, dio la bienvenida a la nueva legislación que enduerece los castigos.