Jueves 31 de julio de 2014, p. 21
A pesar de que el gobierno argentino insiste en que no pasará nada
por tratarse de situaciones diferentes, los expertos vaticinan una serie de consecuencias negativas para la alicaída economía del país, entre ellas más devaluación e inflación, marginación de los mercados de capitales y recesión si hay default.
Según Christopher Dembik, economista de Saxo Bank, habrá una devaluación inevitable del peso
, que ya sufrió una fuerte pérdida de valor a principios de año; una recesión que podría pasar de uno a 10 por ciento del PIB, y un aislamiento internacional de Argentina que acentuaría la falta de acceso del país a divisas extranjeras.