Con el argumento de que no puede atender casos ocurridos después del 9 de enero de este año, la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV) se ha negado a darle ayuda económica a una familia que sufrió el secuestro de uno de sus hijos y el asesinato de otro, y que se vio obligada a salir de manera forzosa de su lugar de origen por temor a perder la vida.

En entrevista con La Jornada, Gerson Quevedo Camarillo y Marisela Orozco Montalvo explicaron que el 15 de marzo de 2014 un grupo de secuestradores plagió en la comunidad de Medellín, Veracruz, a su hijo Gerson Quevedo, de 19 años de edad, y asesinó a Alan Quevedo, de 15 años, así como a su yerno, Miguel Caldelas Morales, de 25.

Aunque recibieron el pago solicitado por Gerson, los delincuentes –supuestamente vinculados al cártel Jalisco Nueva Generación– no le dijeron a los padres cuál era el paradero del joven. El mismo día 15 asesinaron a Alan y a Miguel cuando ambos salieron a preguntar por su pariente en una casa donde pensaban que podía estar.

Luego de denunciar el caso, los padres de las víctimas decidieron llevarlo ante la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada, de la Procuraduría General de la República, instancia que ha registrado muy pocos avances para dar con Gerson, pese a que hay un detenido que confesó haber participado en el secuestro.

Por sugerencia del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad acudieron a finales de abril a la CEAV, donde solicitaron apoyo en su calidad de víctimas de desplazamiento forzoso, pero dicha instancia se negó a brindarles ayuda económica argumentando que, de acuerdo con una circular interna, los casos ocurridos después del 9 de enero no pueden recibir este beneficio.

Luego de una reunión de más de nueve horas ayer (martes) con él, Jaime Rochín (comisionado presidente de la CEAV), nos dijo que después del 9 de enero ellos ya no pueden actuar. No entiendo, porque al mismo tiempo que nos dicen que no somos víctimas, nos dieron ayuda médica y sicológica y un abogado, lamentaron.

Tras enfatizar que recibieron un trato inhumano e hipócrita por parte del organismo, los padres de las víctimas indicaron que dos comisionadas accedieron a darles dinero de su bolsa para ayudarlos, pero como decisión personal, no de la institución.

Rochín nos dijo que la reunión que tuvimos sólo era para que nos dieran viáticos, pero que no tenían nada para desplazados. Supuestamente el martes van a llevar nuestro caso al pleno, pero a mí me suena a burla, a darnos largas. No es justo que nos traten como limosneros cuando la CEAV tiene dinero para atender a las víctimas, subrayaron.