El retraso del presidente Enrique Peña Nieto en el envío de las iniciativas de las leyes reglamentarias de las reformas energética, de telecomunicaciones y político-electoral complica aún más el panorama en el Congreso, que en menos de 80 días que le restan al actual periodo de sesiones debe desahogar obligatoriamente cerca de 60 dictámenes que tienen plazo fatal, algunos incluso ya vencidos.

En el caso de la político-electoral, que fue promulgada hace una semana por el titular del Ejecutivo federal, no ha sido publicada aún en el Diario Oficial de la Federación, y todavía no empiezan a correr los 120 días que la Cámara de Diputados tendrá como plazo para nombrar a los integrantes del instituto nacional de elecciones (INE), que sustituye al Instituto Federal Electoral (IFE).

Para concretar la reforma político-electoral, ambas cámaras deben crear cuatro nuevas leyes –entre ellas la de propaganda gubernamental– que deberán estar listas en la primera semana de junio, debido a que el marco normativo prevé que toda legislación en la materia deberá estar lista 90 días antes de las elecciones que habrá de regir.

Por lo que se refiere a la legislación secundaria de la reforma a los artículos 25, 27 y 28 constitucionales, se requiere modificar por lo menos 20 ordenamientos, antes de finales de abril, dado que en la propia Carta Magna se estableció un término de 120 días naturales, como plazo al legislativo para crear el entramado legal que permitirá a empresas extranjeras explotar el petróleo y la electricidad.

El Congreso ya está en falta, porque las 11 leyes secundarias en materia de telecomunicaciones debieron aprobarse el pasado 9 de diciembre, así como las cartas ciudadanas, entre la que se encuentran las leyes que regirán las candidaturas independientes, la iniciativa ciudadana y preferente, la consulta popular y el derecho de réplica, en agosto de 2013.

La vicecoordinadora del PRD en el Senado, Dolores Padierna, comentó que el retraso en el envío de las iniciativas para las leyes reglamentarias se debe a que Peña Nieto está negociando en lo oscurito con las élites el contenido de esos ordenamientos y no se han puesto de acuerdo.

Sostuvo que fue por ello que el Presidente no hizo uso de su facultad para enviar dos iniciativas preferentes el pasado día primero, cuando se iniciaron los trabajos el Congreso.

A su juicio, es muy grave que Peña Nieto no haya publicado aún la reforma político-electoral, que requiere gran celeridad o de lo contrario se pondrá en riesgo la elección de 2015. El actual periodo es muy corto y si tardan más en llegar las propuestas de las leyes accesorias, será muy difícil que salgan antes del 30 de abril.

Por separado, el vicecoordinador panista, José María Martínez, dijo que para el PAN es prioritario aprobar a tiempo todo el andamiaje que echará a andar al INE, así como la ley general que regule los partidos políticos nacionales y locales, la que regule los procedimientos electorales y la de delitos en la materia.

Padierna dijo que no se comprende que Peña Niero haya promulgado esa reforma en una ceremonia de relumbrón y ocho días después no la haya mandado publicar en el Diario Oficial. De persistir el retraso, adelantó, el PRD le hará un exhorto desde el pleno del Senado, para que no postergue más esa decisión.

El senador del PAN, Javier Corral Jurado, consideró que la carga de trabajo es muy grande y es humanamente imposible discutir y aprobar las leyes secundarias en menos de tres meses, algunas de gran trascendencia para el país, como la legislación que expedirá las normas para el otorgamiento de contratos de riesgo que se otorgarán para la exploración y explotación de hidrocarburos.

El listado de pendientes incluye también las modificaciones en materia de seguridad social universal –la del seguro de desempleo y del Infonavit–, la ley para crear la fiscalía general, que sustituye a la Procuraduría General de la República, y la reglamentaria en materia de responsabilidad hacendaria de estados y municipios.