Los bosques y selvas con manejo sustentable han probado incrementar la masa forestal y recuperar áreas degradadas y deforestadas, así como capturar mayor cantidad de carbono a largo plazo. Además, en lo social, generan mejores condiciones de vida y desarrollo de las comunidades que los manejan, indica un documento del Consejo Civil Mexicano para la Silvicultura Sostenible.

El carbono es uno de los gases de efecto invernadero que ocasiona el cambio climático.

El texto detalla que los bosques manejados de forma sustentable para la producción maderable y no maderable capturan más carbono, porque conservan y amplían la cobertura forestal, se maximiza dicha captura mediante el mejor manejo de las pirámides de edad de los árboles, se generan incentivos económicos para que las comunidades locales conserven su cobertura forestal y se combaten de manera permanente las plagas e incendios forestales.

Precisa que entre la década de los 90 y el 2000, alrededor de 2 mil 300 comunidades operaron con permisos de aprovechamiento forestal.