Las noticias sobre el rescate bancario en España no sirvieron para impulsar la confianza en el mercado bursátil mexicano, que ayer volvió a operar en terreno negativo con una pérdida de 0.77 por ciento, equivalente a 288.16 puntos menos que su cierre del pasado viernes.

La volatilidad internacional, sin embargo, permitirá la llegada de mayor volumen de capitales extranjeros en busca de refugio y para aprovechar los mayores rendimientos que paga el mercado local en bonos gubernamentales.

Analistas del grupo financiero Santander pronosticaron que las tasas de interés en Estados Unidos se mantendrán bajas por meses, lo que mantiene diferenciales atractivos para los inversionistas extranjeros.

En ese entorno, para mañana se espera la subasta de bonos de deuda gubernamentales de largo plazo por 50 mil millones de pesos, que serían utilizados por la Federación para el pago de una emisión anterior que vence precisamente este miércoles 13, en la cual la demanda por parte de extranjeros se espera por arriba de 40 por ciento.

Hasta la semana pasada, según los analistas de Santander, el diferencial entre los bonos mexicanos a 10 años con su par en Estados Unidos se ubicaba en 433 puntos base (4.33 por ciento), considerando que la tasa del bono estadunidense cerró en 1.63 y en México en 5.96 por ciento.

En su publicación de análisis El Indicador Semanal, los especialistas de Santander mencionan que “la tenencia de bonos M (de largo plazo) por parte de inversionistas extranjeros en mayo continuó aumentando... para alcanzar un nivel máximo histórico de 796 mil 600 millones de pesos para el día 30 (45 por ciento del total en circulación).

Asimismo, con toda la volatilidad de los mercados financieros internacionales y del tipo de cambio, la posición de inversionistas extranjeros en bonos M en el mes de mayo aumentó 2 mil 100 millones de dólares. Y consideramos que este flujo se mantendrá en el mes de junio, sobre todo en plazos de cinco a 10 años.

El apetito y los temores de los inversionistas extranjeros propician no sólo la compra de bonos del gobierno mexicano de largo plazo, sino de otros instrumentos de deuda interna, como los Certificados de la Tesorería de la Federación (Cetes), en los cuales los inversionistas extranjeros, según el reporte de los analistas financieros, mantienen una posición de 42 por ciento del total en circulación, es decir, unos 317 mil millones de pesos, siendo uno de los principales compradores del mercado de dicho instrumento.

Una situación similar se mantiene en las emisiones de los llamados Udibonos, donde el capital foráneo alcanza un nivel de 24 por ciento del total. Son emisiones que en los últimos meses han mostrado mayor participación por parte del inversionista extranjero, comentaron los analistas de Santander.

La confianza en el llamado mercado de renta fija no se reflejó en el de renta variable, es decir, en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), cuyo principal indicador, el índice de precios y cotizaciones (IPC), cerró la sesión en un nivel de 37 mil 35.75 unidades, lo que representó una baja de 0.77 por ciento o 288.16 puntos menos.

Ese comportamiento derivó, según especialistas, de la influencia de la pérdida en las bolsas de Nueva York y las dudas que persisten en torno a que el rescate bancario en España sea suficiente para superar la crisis financiera.

Eso, además de los temores que todavía genera la problemática griega y el riesgo de que Italia se convierta en el siguiente dolor de cabeza para la Unión Europea.

El grupo financiero Monex citó declaraciones del premio Nobel de Economía Paul Krugman de que el rescate al sistema bancario ibérico no solucionará la falta de competitividad en España ni atenuará el sufrimiento provocado por las medidas de austeridad.

En el mismo reporte citó al también Nobel de Economía Joseph Stiglitz, quien consideró que el rescate del sistema bancario de España no resultará.

El grupo financiero Banamex opinó que los malos resultados de la jornada bursátil a nivel global se derivaron particularmente por la combinación de una caída en las exportaciones alemanas mayor a lo esperado y el recorte de la calificación soberana de España.