Manifestación virtual reprimida
partir de la primera semana de abril surgió en las entrañas electrónicas del Ministerio del Trabajo francés una manifestación inédita contra el trabajo que mata
por donde se agolparon millones de e-mails contra el silencio
.
Este movimiento de las gotas de agua
, como lo llamaron sus integrantes: empleados, inspectores, agentes del Trabajo a través de Francia, inundó y desestabilizó la maquinaria administrativa gracias a una idea surgida por un aparente error de manipulación, cometido el pasado diciembre, cuando un correo sindical fue enviado a 15 mil adherentes con la posibilidad de contestar a todos. Entonces sucedió que en unas cuantas horas los servidores se cayeron ante tres millones de correos por hora, en cuyos contenidos se leían derivaciones hacia algunas reivindicaciones y comentarios personales, revelando a todos una necesidad de comunicación interna que quedó latente cuando el director de Recursos Humanos advirtió, tres días después del error, que estaba prohibido el uso del intranet para este tipo de correspondencia.
Pero cuando ocurrió el suicidio de un compañero desesperado por la ausencia de sentido de su trabajo
, en enero de 2012, se gestó y estalló, el 31 de marzo pasado, la manifestación virtual donde, entre otras demandas, se exigía que este suicidio fuera equiparado como accidente de trabajo
para otorgar las compensaciones debidas a la familia. Los correos de todos con todos se fueron convirtiendo en un mar de testimonios de sufrimiento, de llamadas de alarma o de auxilio, de ira e indignación, llevando la mayoría copia para los directivos del Ministerio.
Esta manifestación virtual que unió durante más de una semana a todas las agencias del Trabajo del territorio galo, reveló, además de la necesidad de comunicación entre los empleados, su inmenso malestar laboral… hasta que la dirección limitó los envíos colectivos y advirtió que contemplaba la posibilidad de sancionar por falta profesional
, pudiendo llegar a constituir un delito penal
, a quienes pretendieran proseguir este método de manifestarse.
Yuriria Iturriaga