Este miércoles, seis personas fallecieron en Nuevo León, en hechos atribuidos al crimen organizado.

Elementos del Ejército abatieron a tres presuntos delincuentes durante un enfrentamiento en el municipio de Cerralvo, 96 kilómetros al noreste de Monterrey.

Los pistoleros viajaban en una camioneta Minivan con reporte de robo, placas SNV 8515, donde quedaron sin vida dos gatilleros y uno más pereció junto al vehículo al recibir un impacto de bala, cuando intentaba esconderse entre los matorrales de la zona.

Después del mediodía, efectivos de la Agencia Estatal de Investigaciones ultimaron a dos supuestos miembros de la delincuencia organizada y detuvieron a otros 12, que se encontraban en una casa de seguridad ubicada en la colonia Praderas de San Juan, en el municipio de Benito Juárez. Mientras, en la zona comercial de Los Cavazos fue localizado el cadáver de un hombre no identificado.

En el municipio de Ciudad Guadalupe, dos desconocidos que viajaban en un vehículo, arrojaron una granada a la altura de las calles Hidalgo y Zaragoza, a menos de 100 metros de la presidencia municipal de Ciudad Guadalupe, al oriente de la zona metropolitana. No hubo heridos, pero el artefacto dañó los cristales de la escuela primaria José Eleuterio González, tres viviendas y dos vehículos estacionados.

En el municipio de Villamar, Michoacán, cuatro hombres perecieron al enfrentarse a militares. Los presuntos delincuentes llevaban en un vehículo a una persona que acababan de secuestrar, quien resultó lesionada.

En el resto del país, autoridades policiacas documentaron 17 homicidios en siete entidades federativas. De éstos, seis ocurrieron en Chihuahua, tres en Coahuila, tres en Guerrero, dos en Sonora, por separado uno en Durango, Jalisco y Sinaloa.

En esta última entidad, un comando privó de la libertad a José Mario Leal Miranda, jefe de seguridad del penal de Culiacán, cuyo antecesor, José Ramón Amarillas Silva, fue víctima de un hecho similar a finales de marzo y está también en calidad de desaparecido.

Autoridades de Morelos presentaron a un ciudadano cubano como el presunto jefe de una banda criminal organizada que operaba en la entidad y podría ser el responsable del asesinato de 6 personas, entre ellas, los cuatro jóvenes que fueron encontrados descuartizados frente a la discoteca Barba Azul.

El hombre, identificado como Joel Rodríguez Marrero, de 35 años de edad, fue detenido por militares y policías estatales el pasado viernes 6 de abril en una casa del municipio de Xochitepec, con su pareja, una menor de edad, a la que se le vinculó a proceso por delitos contra la salud.

Efectivos de la Armada de México detuvieron al ex teniente del Ejército Mario Hernández Muñoz en la ciudad de Córdoba, Veracruz, al cual decomisaron tres fusiles R15, y seis granadas de mano, así como uniformes tipo militar y equipo de radiocomunicación. Junto al militar se aprehendió a María Evangelina Reyes Aguilar y Javier Domingo Pablo Hernández, de 34 y 21 años de edad, respectivamente, quienes viajaban en el mismo vehículo.