Campeche, Cam., 11 de abril. Ejidatarios de Nunkiní y Santa Cruz ex Hacienda, del municipio de Calkiní, se enfrentaron la noche del martes, con saldo de tres heridos de bala, y al menos 35 secuestrados de ambos bandos, entre ellos tres periodistas y tres agentes policiacos, quienes fueron liberados al mediodía del miércoles, luego de tensas negociaciones.

Los campesinos colocaron piedras y troncos en las carreteras de acceso a esas comunidades, para impedir la intervención de la fuerza pública, y amenazaban con quemar a los secuestrados en caso de que fueran agredidos por los policías.

Hubo tensión durante más de 24 horas, hasta que se concretó la firma de una minuta de acuerdo.

Ambas comunidades se acusan de invadir sus ampliaciones forestales en la zona de Los Petenes, y han impedido que se realicen los deslindes correspondientes.

El lunes, cuando un grupo de campesinos de Nunkiní realizaba mediciones en la zona limítrofe entre ambos ejidos, fueron agredidos por los labriegos de Santa Cruz, quienes retuvieron a 28 de los invasores y los llevaron a la comisaría ejidal.

Los nunkinienses intentaron rescatarlos en varias camionetas, pero fueron repelidos a balazos y pedradas. Tres personas resultaron con rozones de bala.

En represalia, los de Nunkiní cerraron las carreteras de acceso a la comunidad y retuvieron a un grupo de pobladores de Santa Cruz, a quienes también encarcelaron.

El comandante policiaco Mario Alberto Elizalde Jimenez intentó mediar para liberar a los retenidos, pero lo encerraron, al igual que al presidente de la Junta Municipal, Luis Antonio Huchín Naal.

Un grupo de reporteros que llegó al lugar de los hechos a reportar sobre el incidente, fueron despojados de sus equipos y también los encerraron en una vivienda. Los retenidos fueron Óliver Pacheco, de Mayavisión; Érick Hernández Uzcanga, de un canal de cable de Calkiní, y Édgar Icthé Villafaña, corresponsal de Milenio; los liberaron al mediodía de este miércoles.

El procurador general de Justicia del Estado, Renato Sales Heredia, y el secretario de Seguridad Pública, Jackson Villacís Rosado, encabezaron la comisión negociadora que durante varias horas dialogó con las dos autoridades ejidales. Aceptaron que el Tribunal Agrario solucione el problema de límites y mantener el diálogo, sin nuevas agresiones.

Reporteros, fotógrafos y camarógrafos de diversos medios locales se manifestaron afuera del palacio de gobierno de la capital del estado, y colocaron en el suelo sus instrumentos de trabajo por la agresión a sus tres compañeros y en protesta porque les cerraron las puertas del edificio.