El silbante mexicano Genaro Medrano padece leucemia de grado dos, aseguró ayer su colega Felipe Ramos Rizo, quien consideró que esta enfermedad pudo deberse a que el árbitro tuvo que bajar 11 kilos para cumplir con los parámetros que exige la Comisión de Arbitraje de la Federación Mexicana de Futbol. Genaro hizo todo lo que le pidió la comisión y ahora está abandonado. Cambió de residencia, se llevó a su familia, trató de estar en los niveles que le exigían y ahora que está enfermo no tiene ni para comer, ni para pagar renta, declaró Ramos. Explicó que la comisión arbitral exige que los silbantes pasen pruebas físicas muy fuertes, lo que provoca que tengan un desgaste excesivo y un bajo estado de salud por la necesidad de bajar de peso. La Comisión de Arbitraje pidió que no se ventilara este caso, pero ya se dio a conocer, indicó.