Mantiene veredicto de culpabilidad por asesinato
Miércoles 27 de abril de 2011, p. 22
Washington, 26 de abril. Una corte federal de apelaciones de Estados Unidos ordenó hoy rexaminar la condena a muerte de Mumia Abu-Jamal, ex miembro de la organización radical Panteras Negras, sin cambiar su veredicto de culpabilidad por un asesinato de 1981.
La corte de apelaciones de Pensilvania resolvió que Abu-Jamal, en el corredor de la muerte desde hace 30 años, debe tener una nueva audiencia en los próximos seis meses.
Este hombre negro de 57 años, condenado a muerte por el asesinato en 1981 de un policía blanco, un crimen que siempre negó haber cometido, ha sido durante años una causa célebre entre los detractores de la pena de muerte en Estados Unidos.
El mismo tribunal que emitió su decisión este martes había suspendido la sentencia de muerte en 2008, dando lugar a tres años de batalla legal que incluyó la intervención de la Suprema Corte.
El tribunal acordó con los defensores de Abu-Jamal que hubo problemas con las instrucciones a los miembros del jurado durante la fase de decisión del juicio.
El jurado –señala el tribunal– parece haber sido instruido en que se requería unanimidad para considerar circunstancias atenuantes durante el juicio.
Fiscales en Filadelfia expresaron su decepción sobre la decisión y señalaron hoy en un comunicado que podrían presentar una apelación ante la Suprema Corte.
John Payton, director consejero del fondo educativo y de defensa legal de la NAACP, organización de los derechos civiles que participa en la defensa de Abu-Jamal, declaró que la decisión es un primer paso hacia la corrección de un error de larga data.
Abu-Jamal y quienes lo apoyan afirman que el veredicto de culpabilidad contra él fue predeterminado, por ser negro y miembro de las Panteras Negras.
Una petición por la libertad del activista negro lanzada en enero de 2010 supera las 33 mil firmas, incluidas las del lingüista estadunidense Noam Chomsky, la ex primera dama de Francia Danielle Mitterrand y el gigante literario alemán Günter Grass.