Supuesto proyecto ecológico, negocio con recursos públicos, señalan
Lunes 15 de febrero de 2010, p. 35
Monterrey, NL, 14 de febrero. Ambientalistas y ciudadanos en general formaron una cadena humana y realizaron una caminata en defensa del bosque La Pastora, durante la cual gritaron ¡sí al estadio, pero en otro lado!
; además, exigieron a los promotores del nuevo recinto para el equipo de futbol Rayados que desistan de la obra, que atentaría contra el medio ambiente y la tranquilidad en decenas de colonias del municipio de Guadalupe.
El contingente se concentró a la entrada principal del parque La Pastora y de ahí caminó unos dos kilómetros hasta el río La Silla, pasando por la colonia Las Quintas que, según planos del proyecto, se convertiría en estacionamiento.
En la manifestación participaron 44 integrantes del colectivo Pueblo Bicicletero. Hubo quienes llevaron camisetas del citado equipo de futbol y cartulinas que decían: Amo a Rayados, pero más al parque La Pastora
.
Integrantes del Colectivo Ciudadano en Defensa de La Pastora, que convocó a la movilización, leyeron un pronunciamiento en el cual sostuvieron que el estadio no es un gran proyecto ecológico
, sino un negocio privado solventado con recursos públicos y en un espacio público de 25 hectáreas, que los empresarios pretenden obtener gratis por 60 años.
El viernes anterior, la Procuraduría Federal del Medio Ambiente clausuró indefinidamente el terreno donde se pretende construir el estadio, por haber realizado desmontes sin permiso de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales.
Una empresa socialmente responsable (como se presenta FEMSA, impulsora del estadio) no condiciona su contribución en beneficio de la comunidad. Si su propósito es rehabilitar el parque, que haga un donativo o mejore todo el parque sin afectar su vocación ambiental
, afirmaron los manifestantes.
Consideraron que con un estadio de futbol, un centro comercial y las obras de infraestructura que requiren, el parque La Pastora perdería sus características de conservación ambiental.
Además, precisaron, los espacios de esparcimiento del proyecto no serían públicos ni gratuitos, sino para elites que puedan sufragar el costo de los boletos más caros de México
, como ocurre en la actualidad.