Resultaron lesionados cuatro campesinos mexiquenses

Se enfrentan efectivos de la PFP contra comuneros de Xalatlaco

ISRAEL DAVILA CORRESPONSAL

Xalatlaco, Mex., 17 de mayo. Al menos 200 habitantes de este municipio se enfrentaron hoy con efectivos de la Policía Federal Preventiva (PFP) en los límites entre el Distrito Federal y el estado de México, luego de que los últimos se negaran a retirarse del lugar, donde permanecen desde hace nueve meses resguardando el predio Agua Grande, que se encuentra en litigio entre Xalatlaco y comuneros de Santo Tomás Ajusco, de la delegación Tlalpan.

El saldo del enfrentamiento fue de cuatro campesinos mexiquenses lesionados y dos cabañas quemadas, que eran utilizadas por la PFP como resguardo.

El enfrentamiento se dio alrededor de las cuatro de la tarde, cuando los xalatlaquenses regresaban de una diligencia que se efectuó en el predio Agua Grande, a la que acudieron comuneros de Santo Tomás Ajusco y personal del juzgado tercero en materia administrativa, dentro del juicio por la posesión del predio de mil 509 hectáreas.

Al llegar al paraje La Placa, en los límites con el Distrito Federal, los comuneros de Xalatlaco se hicieron de palabras con los policías federales, a quienes exigieron retirarse de la zona, ya que habían ocupado las cabañas de los ejidatarios para el campamento permanente.

Ante la negativa de los efectivos de la PFP, los reclamos subieron de tono hasta que se desencadenó el enfrentamiento, donde se intercambiaron toletazos por piedras y palos.

Otro grupo de comuneros de Xalatlaco intentó recuperar las cabañas que, hasta hace unos meses, utilizaban para comerciar sus productos, pero al no lograrlo les prendieron fuego, por lo que se quemaron algunos utensilios de la PFP.

De inmediato se solicitaron refuerzos en la zona, ya que sólo había 60 efectivos de la PFP. Al llegar más elementos, los comuneros emprendieron la huida a su pueblo.

Fernando Mejía Reza, uno de los líderes del movimiento de Xalatlaco, denunció que los hechos representaron una provocación de las autoridades contra su pueblo, y exigieron al subsecretario de Gobernación, Gonzalo Altamirano Dimas, reinstalar las mesas de negociación para evitar estos actos violentos.

Mejía Reza exigió además a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) atraer los distintos litigios que se iniciaron por la posesión de mil 509 hectáreas del predio Agua Grande, y anunció que se iniciarán una serie de marchas de inconformidad y reclamo para recuperar las tierras que les pertenecen.

Dijo que mañana acudirán de nuevo a Agua Grande para reiterar su exigencia de que se retire la PFP, a la que culpan de quedarse con sus cabañas y dañar el arroyo del que extraen trucha para su venta. Para el 26 de mayo, los habitantes de Xalatlaco tienen programada una marcha hacia el Distrito Federal, donde exigirán a la SCJN se haga cargo de resolver sus juicios.