No obstante, beneficia a turismo, recreación
y alimentos
La Semana Santa detiene 70% de la actividad productiva
del país
LAURA GOMEZ FLORES
La Semana Santa representa dos caras de una misma realidad
en términos económicos: por un lado, aquellos sectores que
se verán beneficiados por los tres días de asueto, como el
turismo, actividades recreativas e inclusive la venta al menudeo de alimentos;
y, por otro, la pérdida de alrededor de 45 mil millones de pesos
al detenerse 70 por ciento de la actividad productiva del país durante
este lapso.
Un
análisis del Grupo Consultores Internacionales señala que
el efecto "días laborables" en el primer trimestre del año
pasado, resultado de los días feriados y la Semana Santa, fue de
71 días, mientras en igual periodo de 2001 sumaron 75. Así
la conjunción de menos días de trabajo y la debilidad económica
prevaleciente en esos momentos dieron como resultado una caída importante
de 2.2 por ciento del producto interno bruto (PIB) en ese trimestre.
Para este año, dicho efecto se percibirá
en el segundo trimestre de 2003, ya que el periodo abril-junio tendrá
tres días menos que el año pasado, es decir 68, hecho que
también se reflejará en el valor de la producción
y el resultado del PIB, puesto que los ingresos generados por la derrama
adicional de los sectores beneficiados con estos días de asueto
no compensan la producción que un día laboral aporta a la
economía del país.
El país genera al día poco más de
21 mil 800 millones de pesos en términos del PIB, cantidad equivalente
al presupuesto de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público
para este año, por lo que, "aun cuando a nadie le incomoda un descanso,
los días de asueto pueden llegar a representar un factor en contra
de su crecimiento económico en un entorno tan complicado como el
que vivimos", advirtió.
Actualmente, precisó la firma privada, México
es uno de los países con mayor número de "puentes y días
festivos" en el mundo, y precisamente este año será particularmente
"bondadoso": viernes 21 de marzo; jueves y viernes santo a celebrarse los
días 17 y 18 de abril; el jueves primero de mayo y el lunes cinco
de mayo; el martes 16 de septiembre; el jueves 20 de noviembre y el jueves
25 de diciembre.
La cara positiva de la moneda es que sectores como el
turismo, el recreativo y el gastronómico se beneficiarán
durante esta temporada. Por ejemplo, la Secretaría de Turismo estima
una afluencia de paseantes al puerto de Acapulco entre 460-470 mil personas
con un gasto per cápita promedio de entre mil y mil 300 pesos diarios.
Mencionó que, de acuerdo con los resultados de
una encuesta telefónica realizada por la dependencia entre poco
más de tres mil personas, el 20 por ciento de los entrevistados
dijo tener intenciones de viajar en el periodo comprendido entre el 14
y el 20 de abril, en grupos de viaje de 6.5 personas en promedio y una
pernocta promedio de cuatro noches, en el 40 por ciento de los casos.
Los principales motivos del viaje, señalaron, serán
por placer y vacaciones; y entre las actividades a desarrollar están
las visitas a playas y familiares; culturales y ecoturísticas; y
compras, entre otras. Mientras, en los destinos mejor posicionados se encontraron
Acapulco, Cancún, Puerto Vallarta, Veracruz y Mazatlán, refirió.
Así, que la derrama económica adicional
generada en esos días resultará un paliativo en materia de
generación de empleos y ocupación para muchas familias, pero
no resarcirá en su totalidad las pérdidas que se generen
al paralizarse "casi en su totalidad" la actividad productiva del país,
destacaron Consultores Internacionales.