Fuertes vientos, posible causa del accidente, según comunicado; se ignora el paradero de la nave

Se desploma avioneta del gobierno de Chiapas con 5 personas a bordo

Autoridades y habitantes del ejido Maravillas-Tenejapa se oponen al retorno de 117 desplazados en 1995

ANGELES MARISCAL, ELIO HENRIQUEZ Y JUAN BALBOA CORRESPONSALES

Una avioneta del gobierno del estado de Chiapas, en la que viajaba Porfirio Encino, secretario estatal de los Pueblos Indios, el piloto Guadalupe Gil Cañas y otras tres personas, se accidentó en las montañas de los Altos de la entidad, supuestamente como resultado de las fuertes ráfagas de viento que azotaron la región el fin de semana.

Al cierre de esta edición no se había podido localizar a la aeronave, cuyo paradero se ignoraba desde la tarde del sábado. La administración a cargo del gobernador Pablo Salazar indicó que en la nave viajaban cinco personas, y dio a conocer que los nombres de los acompañantes de Encino eran Francisco, hermano del funcionario; uno de sus hijos, de cinco años, también llamado Porfirio, así como Berenice López Moreno Chapoy, hija del ex gobernador Javier López Moreno.

De acuerdo con un comunicado que emitió el gobierno chiapaneco este domingo, el accidente "cuyas dimensiones se desconocen", ocurrió alrededor de las 3 de la tarde del pasado sábado, cuando Gil Cañas, piloto de la avioneta tipo Cessna 185, con matrícula XC-BOX, activó un sistema de alarma especial para cuestiones de emergencia. A partir de ese momento se perdió contacto con la aeronave.

Antes, el piloto había reportado malas condiciones de vuelo debido a vientos de hasta 100 kilómetros por hora; por ello había pedido autorización para cambiar la ruta de vuelo, que era Ocosingo-San Cristóbal, con intención de tratar de dirigirse a Tuxtla Gutiérrez, la capital de Chiapas.

La aeronave regresaba de la comunidad lacandona Nahá, desde donde el secretario estatal de Pueblos Indios y las personas que lo acompañaban se habían trasladado al ejido El Jardín, "para sostener una reunión de trabajo" con sus habitantes, indicó el comunicado.

Los trabajos para ubicar a la aeronave se concentraron en una zona que abarcó los municipios de San Cristóbal, Chanal y Teopisca; especialmente se indagó en torno a las comunidades Buenavista, Los Pozos, San Isidro, San Gregorio, Betania y Chilil.

Al menos 32 vehículos terrestres y cuatro aeronaves realizaron recorridos de reconocimiento, además que recorrieron a pie la citada zona diversas brigadas, que incluyeron elementos del Ejército Mexicano, personal del gobierno del estado, de las policías Sectorial y de Caminos, de la Cruz Roja, de Protección Civil estatal y numerosos voluntarios de los poblados cercanos al sitio donde se intuye habría caído la avioneta.

Sin embargo, aproximadamente a las 5 de la tarde del domingo, se presentaron fuertes lluvias en la región por las cuales la búsqueda debió suspenderse, y las brigadas de rescate retornaron a la ciudad de San Cristóbal de las Casas. Personas que participaron en el operativo de rescate señalaron a la corresponsal de La Jornada en Tuxtla Gutiérrez que existían "pocas posibilidades" de que los ocupantes de la aeronave fueran encontrados con vida.

Nacido en la comunidad Jardín, una de las puertas de entrada a la Reserva de la Biosfera Montes Azules, Porfirio Encino Hernández, es uno de los dirigentes históricos de la Aric-Independiente y del movimiento indígena en las cañadas de la Selva Lacandona.

Durante los últimos diez años se ha opuesto a la militarización de la región de las Cañadas del municipio de Ocosingo, se destacó por su oposición a los gobiernos priístas que mantuvieron una constante agresión hacia las comunidades indígenas de la selva Lacandona, y denunció en foros internacionales el desmantelamiento de municipios autónomos del Ejército Zapatista de Liberación Nacional.

En otro tema, autoridades y habitantes del ejido Maravilla Tenejapa, del municipio del mismo nombre, acordaron rechazar el retorno de 117 indígenas tzeltales desplazados desde hace ocho años.

Durante una reunión, a la que asistieron representantes del Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas y funcionarios estatales, autoridades del municipio de Maravilla Tenejapa indicaron que en acuerdo con sus gobernados, impedirán el regreso de los 117 indígenas.

Lo anterior, debido a que culpan a los tzeltales Miguel Méndez Entzín, Diego Méndez Jiménez y Lucía Pérez Jiménez, de haber matado a dos indígenas el 25 de abril de 1995. Las 28 familias, que suman 117 personas, viven desde hace ocho años en la comunidad La Ilusión, en el municipio de La Independencia; en Jerusalén y Rizo de Oro, en Las Margaritas; así como en la cabecera municipal de Zamora Pico de Oro.