La atleta de ocho años de edad participará en la Olimpiada Nacional

La chihuahuense Diana Díaz, una promesa en clavados; ganó dos medallas en la selectiva

Anhela "ser grande, como Fernando Platas", e invita a la niñez a practicar algún deporte

ROSALIA A. VILLANUEVA

El entusiasmo que pone Diana Díaz Huerta, de ocho años de edad, en cada una de sus ejecuciones en la plataforma y el trampolín, es una inyección de ánimo para el pequeño grupo de clavadistas del estado de Chihuahua que participa en la selectiva rumbo a la Olimpiada Nacional, donde aseguró su lugar y afirma que va por medallas.

La doble medallista de la categoría infantil anhela ser "una grande'' en los saltos ornamentales, deporte que practica desde hace tres años, inspirada por su ídolo, Fernando Platas, cuya imagen se le quedó grabada cuando el subcampeón olímpico competía en el Canamex, en la alberca de la Universidad de Ciudad Juárez, donde Diana entrena diariamente bajo la conducción de dos rusos.

Sin alcanzar aún el metro y medio de estatura, la deportista señala que le gustaron los saltos porque "me siento una buena clavadista y por algo me eligieron'', aunque también dice que le atrae el volibol, pero que se siente más segura al "tirarme de la plataforma de cinco metros y sin miedo''.

Como buena campeona, la chihuahuense cuenta los días para estar compitiendo en su casa, ya que su entidad albergará los clavados en la Olimpiada Nacional, en lo que será su tercera participación, por lo que confiesa que hasta "con más confianza le vamos a echar ganas para ganar medallas''.

Acompañada de sus padres, quienes le echaban porras desde las repletas tribunas de la alberca del Centro Deportivo Olímpico Mexicano, Diana espera no defraudar el apoyo que le han dado, pues además de tener excelentes calificaciones en quinto grado de primaria, practica el deporte con entusiasmo.

"No quiero desaprovechar esta oportunidad que me han brindado y por eso invito a los niños a que hagan deporte, porque es muy sano'', comenta la clavadista, quien espera competir algún día por México en unos Juegos Olímpicos.