Señora directora: Los abajo firmantes, profesores del Departamento de Producción Económica de la Universidad Autónoma Metropolitana, unidad Xochimilco, queremos manifestar nuestra enérgica condena y repudio a la intervención militar de Estados Unidos en Irak.

Esta injustificada agresión implica un profundo desprecio a la vida y la imposición del terror al pueblo de Irak. Significa la ruptura del actual orden político internacional, con el objeto de imponer un nuevo orden unilateral fundado en la supremacía militar de Estados Unidos. Además de expresar el cinismo de iniciar una guerra "preventiva" con la impostura de procurar la paz y la libertad del pueblo iraquí.

Nos negamos a aceptar en silencio esta invasión genocida e invitamos a toda la comunidad académica y a la sociedad en general a manifestarse en este sentido.

Aboites A. Jaime, Aguila M. Marcos, Barkin R. David, Capdevielle A. Mario, Carrillo F. Luz V., Concheiro B. Luciano, Correa S. Antonia, Daniel Yolanda V., Dávila I. Hilda, Dávila R. Jorge, Dorantes H. Patricia, Dutrénit B. Gabriela, Espinosa D. Gisela, Estrada G. Ricardo, Fernández R. Margarita, Ferrer R. Salvador, Flores S. José, García de León C. Salvador, García G. Patricia, Garibay A. Ramón, González I. Juan de Dios, Gutiérrez R. Roberto, Hernández G. Carlos, Lara R. Arturo, Lerman A. Aída, López V. Aura, Manchón C. Leonardo, Minsberg L. Liliana, Monroy A. Germán, Morales E. Elda, Muñoz H. Roxana, Novelo U. Federico, Oliveira V. Alexandre, Ontiveros J. Humberto, Peñalva R. Laura, Pérez B. Margarita, Poo G. Virginia, Quintas P. Isabel, Ramírez A. Hilda, Robles B. Mario, Rozo B. Carlos, Ruiz M. Jorge, Saleme A. Magdalena, Soria L. Manuel, Tarrio G. María, Tirado J. Ramón, Villarreal G. Diana
 

Señora directora: En estos momentos tan dramáticos que vive el mundo creo que los mexicanos de buena cepa tenemos que manifestarnos, por todos los medios a nuestro alcance, contra la guerra colonialista en pleno siglo XXI -no neocolonialista- de Estados Unidos contra Irak.

A México le tocó vivir dos terribles episodios de este tipo en el siglo XIX. Nos costó primero la mitad de nuestro territorio con la invasión estadunidense en 1847 y después, entre 1862 y 1867, sufrir y derrotar al imperio francés, al frente del cual se encontraba el crápula Luis Bonaparte, quien trató de establecer una monarquía espuria con un badulaque austriaco, Maximiliano de Habsburgo, hijo ilegítimo de Napoleón II y la reina Sofía.

Bueno, todo esto viene a cuento por la actual situación y su referente con aquélla. Resulta que, diferencias aparte, Francia era entonces la primera potencia militar. Vencedora de las batallas de Solferino, Magenta y Crimea, el ejército francés fue en esa época lo que el gringo es para la nuestra. Tres mexicanos siniestros: el ultramontano Gutiérrez Estrada, Manuel Hidalgo y Juan N. Almonte, junto con la emperatriz Eugenia, le metieron en la cabeza a Napoleón III, al que Víctor Hugo bautizó como "el pequeño", la idea de que podía extender su hegemonía hasta América invadiendo México, mediante una alianza militar con España e Inglaterra y con un príncipe europeo a la cabeza. Estas dos naciones no se unieron a la aventura, fueron más inteligentes y le advirtieron a Francia que iría al desastre. Francia no escuchó y cinco años después hizo el ridículo en el mundo al salir corriendo de México, y su ambicioso y torpe emperador de pacotilla resultó fusilado en Querétaro.

Siempre las grandes potencias han argumentado para invadir: el orden público, el bienestar nacional, la democracia, etcétera.

Francia, en aquellos años siniestros se atrevió a sostener que su ejército y el emperador vendrían a regenerar a los mexicanos. Como hoy los gringos están "liberando" a los iraquíes. El "pequeño" Napoleón quería extender su hegemonía a América Latina -él inventó este término- y en lo personal quería quedarse con las minas de Sonora. Hoy Baby Bush quiere apropiarse del crudo de Irak para su país y para la pandilla millonaria petrolera a la que pertenece.

Hay que leer y releer las dos obras cumbres que se refieren a la intervención francesa para encontrar la similitud referida entre la Francia del petimetre Napoleón III y el actual de Estados Unidos, Baby Bush. Me refiero a las dos obras monumentales sobre ese triste capítulo de la historia mexicana: Maximiliano y Carlota del austriaco Egon Caesar Conte Corti, documentada en los archivos secretos de Viena (Fondo de Cultura Económica, 1944, con prólogo de Alfonso Reyes), y Noticias del imperio, de Fernando del Paso, Mondadori, España, 1987.

Guillermo Zamora

Señora directora: Agradezco este espacio en el cual compartir una experiencia e invitar a participar a las personas que quieran ser parte de las soluciones. Aclaro que no pertenezco a ningún partido político ni a ninguna empresa ni persigo ningún objetivo económico, pero me interesa que construyamos una red amplia de colaboración para lograr mayor bienestar en esta ciudad.

El domingo pasado, 23 de marzo, a las cuatro de la tarde, estaba en el DF. Me llamó mi hija desde Cuernavaca, Morelos: "Mamá, salimos ahora, te aviso al llegar". Esperé hasta más de las ocho de la noche antes de recibir otra llamada: "mamá, tardamos cuatro horas, íbamos a vuelta de rueda".

¿Cansancio? ¿Fastidio? ¿Desesperación? ¿Impotencia? No sé si quienes pasaron toda la tarde del domingo en sus coches pensaron que es posible evitar estas situaciones cada vez más "normales", quiero decir frecuentes. ¿Estamos esperando que alguien nos resuelva esto?

Me parece que en vez de seguir "pensando" y "discutiendo" sobre "el problema del tráfico" podemos trabajar juntos por soluciones efectivas.

Propongo crear espacios ciudadanos para la búsqueda de soluciones. Todavía tenemos el poder de actuar sobre nuestras vidas. Si desean trabajar juntos por una ciudad mejor y recuperar la calidad de vida, escriban a esta dirección: [email protected].

Lourdes A. Díaz-Berrio

Traslado de la manta monumental por la paz

Ante la continuación del genocidio perpetrado por el ejército angloestadunidense sobre el pueblo iraquí y el atroz y vergonzoso silencio oficial del gobierno mexicano ante los restos de una moribunda Organización de Naciones Unidas, el Movimiento Mexicano de Solidaridad con Cuba (MMSC) invita a todos y todas a protestar y a exigir el inmediato cese de la invasión a Irak trasladando la manta monumental que se realizó el pasado domingo por muchas manos, de la embajada estadunidense a la del Reino Unido a las 11 horas este domingo 30 de marzo, para posteriormente llevarla a la representación diplomática del reino de España.

Por el MMSC: Eleonora Contreras, Rafael Olmedo y Francisco Rosas