GUERRA CONTRA IRAK
Es una "reorganización del campo de batalla",
según portavoz del ejército británico
La resistencia obliga a las tropas invasoras a hacer
"una pausa"
Mueren al menos otros 22 civiles iraquíes; destruyen
151 toneladas de leche para bebé: Bagdad
AFP, DPA Y REUTERS
Doha, domingo 30 de marzo. Al menos 22 iraquíes
murieron durante las pasadas 24 horas, debido a bombardeos de las fuerzas
angloestadunidenses en Basora, y 55 soldados iraquíes perdieron
la vida en Kerbala; mientras, el general William Wallace, comandante de
las fuerzas terrestres estadunidenses en Irak, reconoció que la
táctica de guerrilla de los iraquíes hizo necesaria "una
pausa" en la ofensiva.
Según la cadena árabe de televisión
Al Jazeera, que citó a responsables de la Defensa Civil iraquí,
22 personas murieron y 68 resultaron heridas durante los bombardeos de
las fuerzas invasoras en Basora. Al Jazeera difundió imágenes
de heridos hospitalizados, entre ellos niños.
Las fuerzas angloestadunidenses destruyeron un edificio
en el que unos 200 miembros del partido Baaz, en el poder, estaban reunidos
en la región de Basora, afirmó el general estadunidense Vincent
Brooks. Todas las personas que estaban dentro del inmueble perecieron,
de acuerdo con otra fuente militar.
Tanques británicos realizaron el sábado
una incursión en esta ciudad, donde destruyeron el estado mayor
de una milicia pro Saddam Hussein, una torre de transmisión radiotelevisiva
y una estatua del presidente iraquí.
Varios depósitos de alimentos en Basora fueron
destruidos el viernes por "bombardeos británicos", afirmó
el sábado el ministro iraquí de Comercio, Mohammad Mehdi
Saleh, citado por Al Jazeera.
"Destruyeron 76 mil toneladas de productos alimenticios
importados en el contexto del programa Petróleo por alimentos",
declaró. Agregó: "reservas de 151 toneladas de leche para
bebé fueron destruidas".
Protesta ante Naciones Unidas
El
jefe de la diplomacia iraquí, Naji Sabri, protestó en un
mensaje dirigido al secretario general de Naciones Unidas, Kofi Annan,
por ese acto y lo instó a "asumir sus responsabilidades".
En tanto, un soldado británico fue dado por desaparecido
en las cercanías de Basora, informaron fuentes del Ministerio de
Defensa en Londres. Se está investigando si el militar fue víctima
del ataque aéreo estadunidense del viernes, en el que otros cuatro
soldados británicos resultaron heridos.
También el comando central (Centcom) estadunidense,
con sede en Qatar, indaga el caso de afectados por presunto "fuego amigo".
Asimismo, cuatro o cinco soldados fueron apresados la mañana del
sábado por fuerzas iraquíes en Basora, informó la
televisora árabe Al Arabiya, que citó fuentes militares británicas.
Sin embargo, Al Lockwood, portavoz castrense de Gran Bretaña, desmintió
la versión.
En tanto, por lo menos 55 soldados iraquíes murieron
durante la noche del viernes a causa de los ataques de helicópteros
Apache de la división 101 del ejército estadunidense,
cerca de Kerbala, 80 kilómetros al sur de Bagdad, informó
el sábado un oficial de esa división.
Asimismo, cuatro soldados estadunidenses murieron el sábado
por la mañana cuando un atacante suicida hizo estallar un coche
bomba en un retén de carretera instalado por el ejército
invasor al norte de Najaf, 150 kilómetros al sur de Bagdad, señaló
Andrew Valles, capitán de las fuerzas armadas de Washington.
El Centcom consideró que ese hecho no frenará
el desarrollo de la campaña, mientras en la ciudad de Najaf hubo
cruentos enfrentamientos entre marines y miembros de la Guardia
Republicana iraquí, informaron me-dios estadunidenses.
El vicepresidente iraquí, Taha Yassin Ramadan,
saludó el ataque suicida y anunció que habrá más
acciones de este tipo. Según el funcionario, el autor del atentado
fue el suboficial Ali Yafer el Numani, al que calificó de mártir.
De acuerdo con la televisión iraquí, el presidente Saddam
Hussein decidió atribuir "al combatiente mártir" dos de las
más altas distinciones militares en Irak a título póstumo,
entre ellas la prestigiosa medalla Um al Maarik, o Madre de todas las batallas,
nombre dado por los iraquíes a la guerra del Golfo (1991). El Pentágono
comparó el atentado suicida con el accionar de grupos terroristas.
En tanto, expertos examinan cadáveres, que se cree
son de soldados estadunidenses, encontrados cerca de Nasiriya, 350 kilómetros
al suroeste de Bagdad. Las fuerzas estadunidenses de la 82 división
aerotransportada se aproximaron a esta ciudad, para enfrentar a los iraquíes,
indicó un responsable de la Defensa en Washington, que pidió
el anonimato.
Los invasoras bombardearon Bagdad la noche del sábado
al domingo, provocando fuertes explosiones cerca del centro de la capital,
informó Al Jazeera. Cuatro fuertes estallidos se escucharon este
domingo hacia las 2 de la madrugada, hora local, cerca del centro de Bagdad,
mientras otras resonaron del lado norte de la ciudad, según Al Jazeera.
Las líneas telefónicas no funcionan en una parte de la capital,
indicó el corresponsal de Al Jazeera, quien no precisó si
los ataques dejaron víctimas.
Bagdad fue bombardeada en forma intermitente en las primeras
horas del sábado. El Ministerio de Información iraquí
fue dañado y al menos un misil destrozó el último
piso del edificio, el 11.
Una investigación militar de Estados Unidos está
llegando a la conclusión de que fue uno de sus ataques aéreos
el que devastó el miércoles un barrio popular de Bagdad en
un bombardeo que, según Irak, mató a 14 civiles, indicó
este sábado un funcionario del Pentágono.
En este contexto, numerosos misiles iraquíes defectuosos
"cayeron sobre Bagdad haciendo explosión", afirmó el sábado
a Afp un portavoz del gobierno británico, dando a entender que esto
podría explicar las explosiones registradas en dos mercados.
Por otro lado, el jefe de la defensa antiaérea
iraquí, general Mussahim Saab al Takriti, primo de Saddam Hussein,
fue destituido, afirmaron fuentes del gobierno británico.
En el centro de Irak, los combatientes kurdos del Partido
Democrático del Kurdistán avanzaron ocho kilómetros,
sin librar combates, en ruta a la ciudad petrolera de Kirkuk, tras el abandono
de soldados iraquíes de sus posiciones situadas cerca de la localidad
kurda de Qush Tapa, constató Afp.
Unos 130 cadáveres fueron hallados tras un ataque
lanzado en el norte de Irak por miles de combatientes kurdos iraquíes
respaldados por fuerzas especiales estadunidenses contra el grupo islámico
kurdo Ansar al Islam, dijo un militar estadunidense de alto rango. Este
grupo es acusado por Estados Unidos de tener lazos con la red Al Qaeda
de Osama Bin Laden.
Por otra parte, el general William Wallace, encargado
del asalto a Bagdad, reconoció que problemas de logística
y la táctica de guerrilla adoptada por los iraquíes hicieron
necesaria "una pausa" en la ofensiva, que probablemente prolongaría
la duración de la contienda.
Pero el portavoz del ejército británico
en Irak, Al Lockwood, prefirió hablar de "reorganización
del campo de batalla". El general estadunidense Victor Renuart señaló
que "no hay ninguna pausa en el campo de batalla", y añadió
que los ataques aéreos, de artillería y las patrullas continúan.
A su vez, el general Stanley McChrystal, desde Washington, señaló
que las fuerzas angloestadunidenses no tienen ningún problema de
aprovisionamiento.
Mientras, las tropas iraquíes lograron derribar
11 aviones, entre ellos seis aparatos sin piloto y cuatro helicópteros,
así como 130 misiles de las fuerzas invasoras, afirmó un
portavoz en un comunicado difundido por Al Jazeera. Según el texto,
las fuerzas iraquíes destruyeron también 74 tanques y 35
vehículos blindados de transporte de tropas.
El balance de soldados estadunidenses muertos desde el
inicio de la ofensiva contra Irak ascendió a 34. Además,
15 militares están desaparecidos, 104 fueron heridos en acción
y siete han sido reportados como prisioneros de guerra. Según el
ejército británico, hay 22 muertos y dos desaparecidos. Asimismo,
siete misiles crucero Tomahawk han errado hasta ahora sus objetivos
en la guerra en Irak, según reconoció el sábado el
Pentágono, descartando sin embargo que hubiesen explotado sobre
instalaciones civiles.