Los inconformes consideran que el festival desvirtúa la cultura del Totonacapan

Marcha de activistas para protestar una vez más en contra de la Cumbre Tajín

ARTURO JIMENEZ ENVIADO

El Tajin, Ver., 21 de marzo. Más de 500 personas de diversas organizaciones que integran el Frente Nacional en Defensa del Patrimonio Cultural, entre ellas indígenas totonacos, marcharon ayer desde el entronque que va a Papantla hasta el área monumental de esta zona arqueológica para protestar una vez más en contra de la Cumbre Tajín.

Los inconformes consideran que ese festival, que se organiza por cuarta ocasión, viola la normatividad federal que protege el patrimonio cultural porque realiza espectáculos y construcciones dentro de la poligonal de mil 221 hectáreas y desvirtúa la cultura del Totonacapan.

Este viernes, el día más importante por celebrar el equinoccio de primavera (que en realidad sucedió alrededor de las 19 horas del jueves), unas 45 mil personas, según cálculos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), invadieron la antigua ciudad totonaca para ''cargarse de energía". No se reportaron daños a las estructuras, aseguró el INAH, aunque se observó a un joven que al saltar de un nivel al piso, desprendió tres piedras, lo que le valió una reprimenda.

šCultura sí, negocio no!

Las decenas de actividades artísticas, culturales, esotéricas y turísticas concluyeron la jornada del jueves, dentro del parque temático, con el son jarocho y las décimas picosas del grupo tlacotalpeño Estanzuela y la música brasileira de Milton Nascimento, quien en homenaje a las mujeres interpretó piezas de su nuevo disco, Pietá.

Sin la anunciada presencia de tres delegados del EZLN y con un retraso de tres horas, pues comenzó pasada la una de la tarde, la marcha sorteó lluvia y problemas de organización y por fin pudo reunir a contingentes provenientes de los trabajadores del INAH, estudiantes de la ENAH y campesinos de la COCYP, entre otros.

Las consignas tomaron como blancos principales al gobernador Miguel Alemán y a Daniel Goeritz, director del Centro INAH-Veracruz, y contra quien, según la dirigente sindical regional Rita Cruz Valdez, se prepara una denuncia por presuntos daños a dos estructuras y un andén de la zona arqueológica durante la preparación del espectáculo Luz y voces del Tajín.

La marcha llegó a la zona arqueológica y sus integrantes se diluyeron por un momento entre los miles de espiritualistas, unos extrañados y otros interesados en la protesta. ''šCultura sí, negocio no!" o ''šEl turista consciente, se une al contingente!" fueron algunas de las consignas.

En lugar de mitin, la marcha concluyó con las danzas de los Huehues y Los negritos, ejecutadas por indígenas de Cerro Grande, Veracruz.