Continuarán las obras proyectadas y los programas sociales prioritarios, aseguran

En el GDF no habrá recortes, dicen López Obrador y Urzúa

Aclaran que se hace una revisión del gasto corriente de las dependencias como parte del plan de austeridad que se aplica desde 2000 Afirman que la administración actúa con prudencia

ELIA BALTAZAR Y LAURA GOMEZ

El jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador, y el secretario de Finanzas, Carlos Urzúa, aclararon que en la administración local no habrá recortes de personal o en el presupuesto, ni se cancelarán obras ya proyectadas o afectarán programas prioritarios dirigidos a la gente.

Por separado, explicaron que no hay ajuste en la administración, sino una revisión del gasto corriente de las dependencias, como parte de la última etapa del programa de austeridad.

"No se trata sólo de racionalizar recursos, sino de justicia", dijo el jefe de Gobierno, quien concedió, sin embargo, que su administración está actuando con prudencia y de manera precavida ante cualquier eventualidad en el escenario económico nacional, particularmente por la paridad del peso frente al dólar, pues el factor de una posible guerra contra Irak puede alterar la situación no sólo del país, sino del mundo.

"Me preocupa mucho el tipo de cambio -dijo-, porque el dólar está aumentando mucho y casi todo lo que se compra tiene que ver con esta moneda o con el euro, frente al cual el peso también se ha depreciado y no hemos reparado en eso." Por lo pronto la intención de la administración local es que los créditos y deudas que enfrentan se transformen en pesos.

Frente a la situación financiera del país expresó su confianza en que las autoridades federales en la materia, el Banco de México y la Secretaría de Hacienda, "hagan bien las cosas". Hasta ahora, sin embargo, "los indicadores nos muestran que no va a pasar nada grave, que las cosas se van a mantener".

Respecto de las medidas de austeridad que se aplicarán en el DF, el jefe de Gobierno aseguró: "No habrá ningún recorte de personal y lo que hacemos es llevar a cabo una revisión de toda la estructura del gobierno, con el propósito de optimar y liberar recursos para el desarrollo de la ciudad y la construcción de obras y servicios", como una etapa más del programa de austeridad que se aplica desde 2000 y que le ha significado ahorros por más de 6 mil millones de pesos.

Anunció, por ejemplo, que se cancelará el gasto por el uso de una red telefónica que depende de la jefatura de Gobierno y funciona sólo de manera interna, y la aplicación de una política de compras consolidadas para los insumos de la administración local, lo que significará obtener mejores precios por volumen, explicó.

El secretario de Finanzas mantuvo ayer reuniones con el gabinete de seguridad y procuración de justicia, acompañado de la contralora general Bertha Luján y el oficial mayor Octavio Ro-mero Oropeza para revisar los gastos de los que pueden prescindir las dependencias.

Antes, Urzúa aseguró que las autoridades no están recortando, sino eliminando los mil 277 millones de pesos aprobados por la Asamblea Legislativa en la Ley de Ingresos, que se proyectaron de manera errónea, no existen ni existirán, dijo luego de rechazar cualquier versión sobre un posible recorte de personal.

"No estamos recortando, sino eliminando esos recursos que no existen ni existirán", dijo el funcionario, luego de rechazar cualquier versión sobre un posible recorte de personal. Lo demás, aclaró, no son más que medidas para mantener la política de austeridad y hacer la revisión de gasto suntuosos en la administración, como líneas de teléfono, celulares, gasolina, entre otros.

Informó también que la administración capitalina no puede contar a priori con recursos extraordinarios por participaciones federales de ingresos provenientes del aumento en el precio del petróleo, ya que los excedentes no entran en las transferencias a los estados.

Sin embargo, por instrucciones del gobierno capitalino el Sistema de Transporte Colectivo canceló de manera definitiva 15 plazas vacantes de honorarios y confianza; restringirá sus gastos de papelería y telefonía celular y no firmará convenios multianuales para la adquisición de material y equipo, con miras a atenuar los efectos negativos de una caída en la recaudación de impuestos y participaciones federales.

Al realizar un recorrido en el primer vagón rehabilitado, que cuenta con sistema contra rayones y grafitis en la línea 5, el subdirector general del Metro, Luis Canut Abarca, aclaró que los recortes no afectarán ninguno de los programas sustantivos, como son la conclusión de las líneas A y 9, en mayo y agosto, respectivamente; y los proyectos ejecutivos para la renovación integral de la Línea B y la ampliación de la terminal Tasqueña.

La rehabilitación mayor de las líneas 1, 4 y 5 tampoco se alterará, ni el programa de compra de 45 trenes de rodadura neumática, el cual cuenta con un seguro para cualquier paridad cambiaria; ni la incorporación de la tarjeta inteligente, indicó.