Washington, preparado para cualquier contingencia, responde la Casa Blanca
"Guerra total", si EU ataca nuestras plantas nucleares: Corea del Norte
De continuar la política hostil, Pyongyang podría lanzar un "ataque preventivo"
DPA, AFP Y REUTERS
Seul, 6 de febrero. Corea del Norte advirtió hoy que en caso de que Estados Unidos lance un ataque sorpresa contra sus centrales nucleares desatará una "guerra total", ya que sus fuerzas están listas para responder con un "contrataque violento", e incluso no descartó un "ataque preventivo" antes de que lo haga Washington.
En respuesta a estas nuevas advertencias de Pyongyang, la Casa Blanca afirmó que Estados Unidos está preparado para enfrentar "cualquier contingencia" al respecto, declaró el vocero Ari Fleischer.
Este tipo de "retórica" perjudica más a Pyongyang, agregó el portavoz, mientras el secretario de Estado, Colin Powell, señaló que el gobierno de George W. Bush no está ignorando el problema norcoreano, a pesar de estar inmerso en una eventual guerra contra Irak, pues no se dan el "lujo" de ocuparse sólo de un asunto.
Añadió que han "tomado nota" del anuncio norcoreano sobre la reactivación de su reactor nuclear o que están por hacerlo. "Hablaremos con ellos, tenemos comunicación... todavía estamos buscando la fórmula correcta de avanzar", admitió Powell.
A su vez, el secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, calificó a Corea del Norte de "terrorista" y se preocupó de que "viole tres o cuatro acuerdos.
"Si Estados Unidos inicia un ataque sorpresa contra nuestras instalaciones nucleares pacíficas, eso desatará una guerra total y abierta", puntualizó el periódico norcoreano Rodong Sinmun, del gobernante Partido de los Trabajadores. Asentó que "responderemos sin piedad a ataques preventivos estadunidenses".
Más aún, un funcionario norcoreano del ministerio de Relaciones Exteriores declaró a la BBC de Londres que su país podría adelantarse y lanzar un "ataque preventivo" en caso de que Estados Unidos siga con su "política hostil" de aumentar la cantidad de soldados y armamentos destinados a la región.
The Guardian citó al mismo vocero norcoreano de la cancillería, Kim Pyong Gap, quien señaló que "Estados Unidos dice que después de Irak somos los próximos". Sin embargo, agregó, "nosotros tenemos nuestras contramedidas. Los ataques preventivos no son un derecho exclusivo de Estados Unidos".
Si bien Kim insistió en que su país está preparado para la guerra, subrayó que su gobierno está en disposición de dialogar con el gobierno de Bush. Reiteró que su reactor sólo producirá electricidad, y concluyó que "si ellos no tienen intención de hacer la guerra en la península coreana, deberían aceptar la propuesta de firmar un tratado de no agresión, pero no quieren firmarlo".
Corea del Sur reaccionó con reservas al anuncio previo de Pyongyang sobre la reactivación de sus instalaciones en Yongbyon para producir electricidad, al señalar que no hay seguridad de que ya hayan sido reactivadas.
Por lo demás, reconoció que Washington está enviando más personal y equipo de la fuerza aérea a territorio sudcoreano para cualquier contingencia en aquella parte del mundo, pero que le aseguró no tener intención de atacar.
Japón pidió a Corea del Norte que detenga toda actividad nuclear, de acuerdo con el primer ministro Junichiro Koizumi. Indicó que su gobierno se mantendrá en contacto estrecho sobre esta materia con Corea del Sur y Estados Unidos.