Propone crear un fondo internacional para combatir
la miseria en países no desarrollados
Declarar la guerra al hambre, pide Lula en el foro
de Davos
"Tras la caída del Muro de Berlín,
otros muros separan a los ricos de los pobres", señala
Sostiene que es "absolutamente necesaria la reconstrucción
del orden económico mundial"
Urgente, unirse en busca de la paz mundial y solucionar
por vía pacífica los conflictos, indica
AFP, REUTERS Y DPA
Davos, 26 de enero. En un aplaudido discurso, el
presidente brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva, pidió este
domingo a los países más industrializados y a los líderes
empresariales y políticos reunidos en el Foro Económico Mundial
declarar la "guerra al hambre" y crear un fondo internacional para combatir
la pobreza.
También afirmó, en la que fue su primera
intervención ante un foro internacional como mandatario brasileño,
que "la libertad de mercado significa ante todo libertad y seguridad para
los ciudadanos" y exigió un "libre comercio caracterizado por la
reciprocidad".
"Propongo crear un fondo internacional para combatir la
miseria, el hambre y la pobreza en los países del tercer mundo",
señaló el ex sindicalista, provocando los aplausos del público
del foro, que se realiza anualmente en esta localidad suiza y que reúne
a los líderes de la comunidad empresarial, financiera y política
del mundo.
Lula
señaló que dicho fondo tendría que estar "constituido
por los países del G-7 (los siete países más industrializados
del mundo) y financiado por los grandes inversionistas mundiales", aunque
no dio más detalles.
"Necesitamos urgentemente unirnos en busca de la paz mundial
y declarar la guerra al hambre, y ustedes pueden estar seguros de que Brasil
realizará su parte del trabajo que le toque hacer", señaló
el mandatario, que tras asumir el primero de enero lanzó la guerra
contra el hambre en su país, el más poblado de América
Latina, con más de 175 millones de habitantes, y la novena economía
del mundo, pero también con 45 millones de pobres.
"La pobreza, el hambre y la miseria son a menudo caldo
de cultivo en el que se crecen el fanatismo y la intolerancia", añadió.
Llamado a un trato justo
En un discurso apasionado, el líder del izquierdista
Partido de los Trabajadores mencionó varias veces la división
entre países ricos y pobres y habló de la necesidad de luchar
en favor de un trato justo para los países en desarrollo, sobre
todo en el comercio y la deuda externa.
"Más de 10 años después de la caída
del Muro de Berlín, aún vemos otros muros que separan
a los que comen de los que tienen hambre; a los que tienen trabajo de los
que están desempleados; a los que viven con dignidad de los que
viven en las calles o en barrios marginales", señaló.
Lula, que habló momentos después de un agresivo
discurso sobre Irak del secretario de Estado estadunidense, Colin Powell,
instó a que "los conflictos sean solucionados por vías pacíficas
y sólo bajo la égida de la ONU", en alusión a la crisis
con Bagdad.
Ante los líderes empresariales y economistas que
en los últimos años defendieron una política económica
liberal, Lula invitó a los presentes "en la Montaña Mágica
de Davos a mirar al mundo con otros ojos", en alusión al libro
del alemán Thomas Mann, del mismo título, ambientado en la
acomodada estación de esquí suiza.
"Aquí en Davos se convino decir que hoy sólo
existe un solo Dios: el mercado. Pero la libertad del mercado significa
ante todo libertad y seguridad para los ciudadanos", explicó.
El ex obrero metalúrgico consideró "absolutamente
necesaria la reconstrucción del orden económico mundial para
atender a los miles de millones de personas ansiosas que viven al margen
de los extraordinarios progresos científicos y tecnológicos
que el ser humano fue capaz de construir".
Además arremetió contra la actitud de los
países ricos: "De nada nos valdrá el esfuerzo exportador
que queremos impulsar si ellos siguen defendiendo el libre comercio y practicando
el proteccionismo.
"No aceptamos la idea de que el mercado libre sólo
es bueno para los países desarrollados", afirmó. "Queremos
respetar los derechos de todos. Pero también quiero que otros respeten
los derechos de Brasil. No queremos ser tratados como ciudadanos de segunda,
queremos un trato en igualdad de circunstancias".
Brasil "debe salir del círculo vicioso de obtener
nuevos préstamos para pagar préstamos anteriores", mencionó.
Brasil, añadió, "está luchando contra la corrupción
con mucha fuerza y no puede seguir siendo un gigante dormido. Y si Dios
quiere, despertaremos a ese gigante.
"Sin cambios en el orden económico mundial, todo
lo que estamos haciendo para que se recupere la economía brasileña,
no alcanzará sus objetivos", insistió Lula, quien hizo uno
de los discursos más destacados en este foro, un encuentro que suele
ser considerado por sus detractores como un festival del capitalismo y
el neoliberalismo.
El mandatario brasileño llegó aquí,
de donde partirá mañana en dirección a Alemania, procedente
del Foro Social Mundial que se celebra en Porto Alegre, al que algunos
califican justamente de reunión anti-Davos.
Lula, quien ha sido uno de los impulsores del Foro de
Porto Alegre, intervino el viernes en el Foro Social ante una 80 mil personas,
a las que les explicó que iría a Davos para aprovechar esa
tribuna y porque considera necesario abrir un diálogo entre los
dos encuentros, al tiempo que admitió que había sectores
que se oponían a que se presentara en Suiza.
Agresión en Porto Alegre
Precisamente, el presidente del Partido de los Trabajadores,
José Genoino, fue agredido este domingo en Porto Alegre por una
mujer que le lanzó un pastel en la cara, al tiempo que gritaba:
"Lula no nos representa en Davos".
El hecho ocurrió en medio de una conferencia de
prensa que Genoimo ofrecía en un hotel de Porto Alegre. Cuando el
líder estaba elogiando el discurso que el mandatario brasileño
había pronunciado en Davos, una mujer se acercó sorpresivamente
hasta cerca de la mesa central donde estaba y prácticamente le plantó
el pastel en la cara.
Acto seguido y en medio de la sorpresa de los asistentes
a la conferencia, la mujer salió rápidamente del salón
sin ser alcanzada.
En un panfleto dejado en el salón, firmado por
la organización Pasteleros sin Fronteras, se manifestaba el "repudio
a la confusión promovida por el PT, que quiere hacer creer que nuestro
movimiento puede ser representado por algún tipo de gobierno".