REPUBLICA DE PANTALLA
Jenaro Villamil
Cerisola-Tv Azteca, intereses compartidos
Los beneficios de la SCT a Salinas Pliego
¿A quién más demandará Ferriz
de Con?
CUANDO EL próximo 21 de enero el titular
de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), Pedro Cerisola,
comparezca ante la comisión correspondiente del Senado de la República
tendrá que enfrentar no sólo una larga lista de críticas
y cuestionamientos ante las irregularidades cometidas por la dependencia
que él encabeza en el conflicto Canal 40-Tv Azteca, sino que es
probable, a decir de algunos legisladores, que enfrente acusaciones que
pueden derivar en un juicio político, de acuerdo con lo estipulado
en la Ley Federal de Responsabilidades de los Servidores Públicos,
la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal
y el propio reglamento de la secretaría.
DIVERSOS ESPECIALISTAS comentan que la evidente
omisión de la SCT en la acción de despojo que cometió
Televisión Azteca cuando ocupó la señal de CNI-Canal
40 en el cerro del Chiquihuite la madrugada del 27 de diciembre, constituye,
en primer lugar, una violación al artículo 36 de la Ley Orgánica
de la Administración Pública Federal, en el cual se estipula
que a la SCT le corresponde "IV. Otorgar concesiones y permisos para establecer
y operar servicios en el territorio nacional, fomentar, regular y vigilar
su funcionamiento y operación, así como negociar convenios
para la prestación de servicios aéreos internacionales".
LA
OMISION cometida durante casi dos semanas -al no ejercer su autoridad
para restablecer la señal de Canal 40 ante la flagrancia del despojo
de Tv Azteca- estaría en uno de los supuestos que mencionan los
artículos 6 y 7 de la Ley Federal de Responsabilidades de los Servidores
Públicos. Obviamente, le corresponderá al Congreso de la
Unión determinar si se cumplieron o no estos supuestos. Los observadores
consultados indican que en las filas del PRI, del PRD y entre no pocos
legisladores panistas el descontento ante el "escandaloso silencio" y,
después, ante el "aseguramiento ilegal" de Canal 40 que afectó
a un bien público concesionado, tendrá altos costos para
el titular de Comunicaciones y Transportes.
POR LO PRONTO, a Cerisola el "arreglo" en el conflicto
entre las dos televisoras lo coloca en una situación de franco favoritismo
hacia Tv Azteca. Esta situación no es nueva. Más bien revela
que existen intereses compartidos entre la empresa de Salinas Pliego y
uno de los personajes fundamentales del "primer círculo" foxista.
Basta con revisar algunos de estos antecedentes:
1. EN mayo de 2000 Cerisola, como representante
del candidato panista Vicente Fox, fue señalado en diversos medios
como el artífice de una estrategia para "reventar" el segundo debate
entre los candidatos presidenciales y después favorecer a la televisora
del Ajusco. En su editorial del 24 de mayo de 2000, La Jornada subrayó:
"sería imposible afirmar que entre Fox y la compañía
que preside Ricardo Salinas Pliego hubo un pacto para trocar rating
a cambio de cobertura; pero el hecho de que un candidato presidencial
se haya comportado como agente de ventas de un emporio televisivo, y que
éste haya actuado, a su vez, como oficina de relaciones públicas
del aspirante, dan pie a la sospecha".
2. EN octubre de 2000 el antecesor de Cerisola,
Carlos Ruiz Sacristán, titular de la SCT, expresó una opinión
frente al litigio que desde julio de ese año habían entablado
Tv Azteca y CNI-Canal 40. De acuerdo con esta posición, el Canal
40 era inembargable, según los artículos 2, 16 y 26 de la
Ley General de Bienes Nacionales, el artículo 4 de la Ley Federal
de Telecomunicaciones y 1 y 2 de la Ley Federal de Radio y Televisión.
Después de asumir en diciembre de 2000 la titularidad de la SCT,
Cerisola nunca volvió a avalar esta posición. Su silencio
permitió que Tv Azteca reviviera la demanda del embargo precautorio
ante tribunales y que el conflicto se llevara a la corte internacional
de arbitraje de París. La autoridad pública simplemente se
mantuvo en un silencio que favoreció a la empresa de Salinas Pliego,
tal como viene sucediendo desde los sucesos del 27 de diciembre.
3. NO sólo con el silencio Cerisola ha beneficiado
a Tv Azteca. Ejidatarios de Cuautepec han solicitado una y otra vez ante
el presidente Vicente Fox que dé marcha atrás al decreto
por medio del cual les expropiaron mil 800 metros cuadrados del cerro del
Chiquihuite para favorecer a Tv Azteca. Este decreto fue avalado por la
SCT a los cuatro meses de haber tomado posesión el gobierno foxista,
y nunca hubo una justificación sobre su utilidad pública.
El 4 de agosto de 2002 un grupo de ejidatarios encabezaron protestas contra
Cerisola (La Jornada, 5 de agosto de 2002). En declaraciones al
periódico Milenio, publicadas el jueves 16 de enero, los
dirigentes ejidales consideran que "con lo ocurrido con CNI-Canal 40 tenemos
temor que los tribunales reciban línea para favorecer a la televisora
del Ajusco".
4. EN marzo de 2001 la SCT admitió que Tv
Azteca está en busca de las concesiones de los canales 58 y 64 de
UHF que existen desde 1993. El otorgamiento de estas concesiones se realizará
entre 2003 y 2004. La discrecionalidad ha sido el signo constante en la
gestión de Cerisola, a pesar de que una y otra vez este gobierno
ha afirmado que sólo se darán estas concesiones hasta que
se reforme la Ley Federal de Radio y Televisión. En contra del principio
de transparencia, en abril de 2002 la SCT renovó por 12 años
82 concesiones de radio y televisión, y se espera que entre este
año y 2004 se renueven la casi totalidad de las 436 concesiones
de televisión vigentes. Televisa y Tv Azteca acaparan 80 por ciento
de estas. La televisora del Ajusco pretende, por medio de su "amigo" en
el gabinete, quedarse no sólo con la señal de Canal 40, sino
obtener alguna de las dos concesiones de UHF.
5. EN el litigio específico entre la televisora
del Ajusco y Canal 40, Pedro Cerisola emitió una serie de comentarios
que es necesario retomar porque pasaron desapercibidos. En una entrevista
el 7 de enero de este año con su amigo, el conductor Pedro Ferriz
de Con, Cerisola expresó que la situación en el cerro del
Chiquihuite no representaba una "emergencia nacional ni es tan grave como
la toma de carreteras o puentes". Dijo que, "en teoría", hubo un
ataque a las vías generales de comunicación por una persona
distinta al concesionario y se justificó: el gobierno no actuó
de inmediato porque "no se trató de una carretera" y la situación
"no es la misma en términos prácticos". Consideró
que no hubo daño físico a nadie, por lo que tampoco constituyó
una "emergencia nacional". Estas declaraciones se pueden consultar en la
página web del grupo Imagen.
SI ESOS son los criterios de Cerisola está
claro que para él una señal televisiva tomada por métodos
gangsteriles no es grave y que sólo "en teoría" hubo un ataque
a las vías generales de comunicación. ¿Acaso esperaba
que existiera algún muerto para actuar? ¿Cree el titular
de la SCT que el espectro radioeléctrico se puede subastar al mejor
postor o comprar por "abonos políticos" en Electra?
Solidaridad con Trejo Delarbre
NO ES tampoco una casualidad que bajo este ambiente
de impunidad avalada por la SCT y con los antecedentes de los citatorios
ministeriales a reporteros de La Jornada para que revelen sus fuentes
informativas, Pedro Ferriz de Con ha decidido emprender otro conflicto,
ahora judicial, contra otro comunicador. En este caso se trata de uno de
los analistas más serios y sistemáticos del panorama de los
medios de comunicación en México: Raúl Trejo Delarbre.
UNA CARTA abierta al procurador general de la República,
Rafael Macedo de la Concha, subraya en los siguientes términos el
riesgo de que las denuncias de Ferriz de Con se conviertan en un acto intimidatorio
contra la prensa crítica:
"CONSIDERAMOS QUE la difamación y la calumnia
deben ser castigadas con todo rigor cuando existan, y afianzar así
una práctica jurídica que proteja la vida privada y la honra
de la persona.
"SIN EMBARGO, una cosa es difamar y otra muy distinta
el ejercicio crítico del periodismo.
"QUIENES FIRMAMOS este documento conocemos la solidez
ética y la trayectoria profesional honorable de Raúl Trejo,
que de ninguna manera ha difamado la vida privada del denunciante.
"EN CONTRASTE, conocemos también el ejercicio
de un periodismo frívolo, siempre cercano al poder en turno y en
no pocas ocasiones difamatorio que practica el señor Ferriz de Con.
"DADOS LOS antecedentes del denunciante, hay razones
para temer que esta denuncia penal sea una respuesta vindicativa a los
artículos críticos que Raúl Trejo Delarbre ha publicado
sobre importantes personajes del grupo gobernante en nuestro país".
POR ESTAS razones, los firmantes demandan que la
PGR desahogue con "absoluta imparcialidad" las diligencias y que "no se
admita, bajo ninguna circunstancia, presión" de algunas terceras
personas, "por más poderosas que sean".
ENTRE LOS firmantes están los periodistas
José Cárdenas, Raymundo Rivapalacio, Pablo Hiriart y Marco
Levario; Hugo Almada, de Alianza Cívica; Eréndira Cruz, del
Cencos; los académicos Jorge Carpizo, José Carreño
Carlón, Beatriz Solís, Javier Esteinou y varios más.
EL ESPIRITU justiciero de Ferriz de Con se dirige
no sólo contra Raúl Trejo, sino una decena más de
comunicadores y periodistas, incluyendo a ex trabajadores del grupo Imagen
que se salieron con Carmen Aristegui y Javier Solórzano después
del polémico "ataque a la cabina" que protagonizara el propio Ferriz
de Con contra Aristegui, envuelto en el argumento a favor de uniformar
y homogeneizar los contenidos informativos de Imagen.
¿DE ESO se trata también esta nueva
acción protagonizada por Pedro Ferriz contra otros periodistas:
de uniformar, intimidar o desaparecer la crítica informativa que
tan incómoda le resulta ahora al presidente Vicente Fox?