Reclama aplicación de la ley en el caso Canal
40
Señora directora: Agradecemos la plublicación
de esta carta, dirigida al presidente Vicente Fox Quesada.
Los hechos suscitados entre Tv Azteca y Canal 40 cuestionan
la confianza de la ciudadanía en la actual administración
federal, debido a que más allá de una controversia judicial
entre las partes, se encuentra en litigio la operación de un bien
de la nación que la ley vigente define como de interés público
y por ello garantiza su salvaguarda por parte del Estado.
De igual manera, la evidente ausencia de autoridad que
posibilitó la toma de instalaciones, así como la posterior
invasión de la señal por parte de Tv Azteca, vulneran la
certeza jurídica que debe imperar en la ciudadanía cuando
existe el estado de derecho. Este hecho se agrava ante la amenaza de requisa
hacia la empresa CNI-40, que no solamente es infundada, además de
violatoria de la actual Ley de Radio y Televisión, sino que constituye
una imposición extrajudicial.
Esta situación pone en entredicho a las instituciones
jurídicas, así como los mecanismos legales de resolución
de controversias, mismos que fueron públicamente desdeñados
por la empresa televisiva (Tv-Azteca) que pocos días antes denostaba
a las organizaciones sociales que se manifestaron en el Congreso de la
Unión tomando sus instalaciones para plantear una exigencia
legítima y de pleno derecho.
En este contexto las organizaciones sociales y civiles
que integramos la mesa para la reforma integral de medios de comunicación
nos manifestamos porque el gobierno en su conjunto reasuma el papel regulador
del Estado en esta materia, a la luz del sistema jurídico imperante,
de manera que nadie esté por encima de la ley.
En la hora que las componendas políticas sustituyen
al sistema jurídico, las organizaciones firmantes solicitamos la
sensibilidad de las autoridades para dar celeridad al proceso de revisión
de la iniciativa de ley en materia de radio y televisión que presentó
la sociedad civil en diciembre pasado, misma que pretende, entre otras
cosas, transparentar el régimen de concesiones y hacer público
el origen de las inversiones en los medios de comunicación.
Más allá del resultado jurídico en
la controversia entre las televisoras, resulta urgente promover el debate
en torno a la nueva ley, con la finalidad de reiterar el compromiso de
todos los actores --incluyendo a la sociedad en su conjunto-- y fortalecer
el régimen jurídico en esta materia, que por su naturaleza
constituye uno de los servicios públicos más importantes
del Estado
Por ello, al tiempo de reiterar nuestro compromiso con
esta tarea, exigimos de la autoridad competente que se haga lo necesario
para la restitución inmediata del estado de derecho.
Atentamente
Por la mesa para la reforma integral de los medios
de comunicación: Centro Nacional de Comunicación Social (Cencos),
AC; Causa Ciudadana, APN; Alianza Cívica, AC; Asociación
Mundial de Radio Comunitrarias (AMARC); Amigos de Radio Educación;
Comunicación Comunitaria, AC; Convergencia de Organismos Civiles
por la Democracia, AC; Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín
Pro, AC, y Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de Derechos
Humanos, AC. Maestra Eréndira Cruz Villegas (Cencos), responsable
de la publicación
Precisiones a comentario de Miguel Alemán
Señora directora: Ruego a usted publicar
la siguiente carta, por medio de la cual expreso de manera pública
mi preocupación por el siguiente hecho:
El gobernador de Veracruz, Miguel Alemán Velasco,
declaró que el Tratado de Libre Comercio de América del Norte
(TLCAN) está "por arriba de la Constitución" (entrecomillado
de la nota de Matilde Pérez U., enviada de La Jornada, miércoles
8 de enero, página 5), lo cual desde luego no es verdad. Más
adelante, según la misma nota, Alemán reiteró que
el TLCAN "...para nosotros es un tratado y una ley, porque fue ratificado
por el Congreso y está por encima de la Carta Magna..."
Al respecto hay que aclarar: A. En efecto, el TLCAN jurídicamente
es un tratado. B. Los tratados los ratifica una sola cámara del
Congreso de la Unión, la de Senadores (ver el artículo 76
primer párrafo). Así ocurrió, desde luego, con el
TLCAN. C. Los tratados no están por encima de la Constitución,
sino por debajo de ella. D. El nivel jerárquico que corresponde
a los tratados es el equivalente al de las leyes, pues ambos sólo
tienen validez siempre y cuando "estén de acuerdo con la misma"
Constitución (ver el artículo 133). Ahora bien, en términos
federales, la Constitución, las leyes y los tratados son, en su
conjunto, superiores a las "disposiciones en contrario que pueda haber
en las constituciones o leyes de los estados", según lo dispone
el mismo artículo citado.
Más aún, para adicionar o reformar la Constitución
se requiere de la aprobación de las dos cámaras del Congreso
de la Unión "por el voto de las dos terceras partes de los individuos
presentes" y, además, que tales reformas o adiciones "sean aprobadas
por la mayoría de las legislaturas de los estados" (ver el artículo
135). Mal entonces podrían estar por encima de la Constitución,
ni siquiera a la par con ella, como si fueran adiciones a la misma, los
tratados, instrumentos que sólo son aprobados, como ya se dijo,
por una sola cámara.
Por cierto, ni los tratados ni las leyes son intocables,
puesto que no lo es ni siquiera la propia Constitución. Ambos instrumentos
jurídicos pueden modificarse y aun cancelarse, cuando así
conviene. En opinión de quien escribe estas líneas, la cancelación
es lo que debe hacerse con el TLCAN, todo en su conjunto, puesto que a
cambio de beneficiar a algunos pocos, los muy poderosos, ha traído
males sinfín al pueblo mexicano. Pero de esto podremos hablar en
otra ocasión.
Para terminar diré que me parece preocupante que
un funcionario de elección popular, que desempeña un cargo
de elevada responsabilidad, ignore el contenido de la ley suprema de los
mexicanos, sobre todo en un tema que toca un aspecto central, el que se
relaciona con la independencia y la soberanía de la nación.
En la página web del gobierno de Veracruz se informa que
Miguel Alemán Velasco se recibió como licenciado en derecho
por la UNAM, aunque esto tampoco sería un requisito para estar informado
sobre temas que competen a la educación cívica elemental
de todos los mexicanos.
Cuauhtémoc Amezcua D.
Reivindica la COD su derecho a participar
Señora directora: En nombre de la justicia
y el respeto que merecen los campesinos miembros de nuestra organización,
le agradecería publicar esta respuesta a las declaraciones que representantes
de El campo no aguanta más hicieron a su respetable periódico.
El 6 de enero del presente año fuimos invitados
como organización campesina a participar en la reunión convocada
por la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación
(Sagarpa) en Los Pinos con el presidente Vicente Fox, cuyo objetivo era
la firma de un Acuerdo Nacional para el Campo. Con profunda indignación
vemos que en nota de La Jornada del 8 de enero titulada "Sagarpa
da albazo para impedir la revisión del TLC" se incluye el
nombre de nuestra organización, Convergencia de Organizaciones Democráticas
(COD, antes Convergencia de Organizaciones Sociales), entre las que, de
acuerdo con El campo no aguanta más, fueron utilizadas por Sagarpa
para dar un albazo a la revisión del TLCAN.
Estas declaraciones carecen completamente de fundamento
y constituyen una difamación que contradice la larga trayectoria
de lucha de nuestra organización. La COD fue fundada en 1997 en
Irapuato, Guanajuato, siendo entonces gobernador Vicente Fox. Las primeras
luchas desarrolladas por la organización en esa entidad lograron
la concertación de mejores precios para el sorgo y el trigo de productores
de la región, protegiéndolos de esta manera de los efectos
negativos del TLCAN, que ya para entonces hacía estragos en este
tipo de productos. Otro de los logros obtenidos en esta lucha, en 1998,
fue el apoyo de 100 pesos por tonelada a los productores, mismo que actualmente
sigue vigente.
La lucha social de la COD por el campo en Guanajuato fue
difícil, ya que los logros sólo se obtuvieron bajo fuertes
medidas de presión de los campesinos, tales como marchas, cierre
de carreteras y plantones en oficinas de gobierno, que demostraban la unión
y fuerza del movimiento. La COD además defendió con base
en unidad y resistencia a campesinos que se pretendía desalojar
injustamente de sus tierras. Otro de los objetivos de la organización,
además de la defensa y solución inmediata de los problemas
de sus agremiados, era construir alternativas para mejorar las condiciones
en el campo. Entre éstas sobresale la formación de la primera
inmobiliaria campesina Irapuato XXI y la creación de parafinancieras
rurales.
Es importante enfatizar que la COD cuenta actualmente
con presencia en varios estados, mismos que demostraron su participación
en la marcha y plantón realizados el 28 de noviembre de 2002 frente
a la Secretaría de Gobernación y la Sagarpa, en donde se
llevó a cabo una mesa de trabajo con las autoridades.
Por consiguiente, la invitación a este tipo de
reuniones se basa en la presencia y trayectoria de la organización,
y no en colusiones oscuras, como pretenden organizaciones como El campo
no aguanta más, que son mucho más recientes y que carecen
de la trayectoria y la presencia a nivel nacional con que cuenta la COD.
Atentamente
Rafael Carvajal Torre, coordinador nacional de Convergencia
de Organizaciones Democráticas