El gobierno de China puso en marcha acciones
preventivas
Recuerdan en distintos países a víctimas
de la pandemia
REUTERS Y AFP
Johannesburgo, 1º de diciembre. Millones de
personas en todo el mundo celebraron este domingo el Día Mundial
de la Lucha contra el Sida, en medio de cifras que muestran que la epidemia
parece burlar todos los esfuerzos por controlarla.
"Rendimos un homenaje a todos los niños que han
estado a nuestro cuidado", dijo Jackie Schoeman, del Santuario para Bebés
de Cotlands, que el domingo celebró una ceremonia en Johannesburgo
para enterrar las cenizas de algunas de las recientes víctimas de
la pandemia.
En un mensaje divulgado por la Casa Blanca, el presidente
George W. Bush pidió a los estadunidenses hacerse eco de esta jornada
y recordó que el sida ya mató a 20 millones de personas "y
matará a millones más".
Bush subrayó que en 2003 su gobierno dedicará
un presupuesto de 2 mil 900 millones de dólares a la investigación
de vacunas y tratamientos contra el sida. Washington también prevé
gastar 500 millones de dólares en el fondo internacional destinado
a luchar contra la trasmisión del Virus de Inmunodeficiencia Humana
(VIH) que provoca el sida de madre a hijo, sobre todo en los países
de Africa y el Caribe, "donde este problema es más grave", indicó
Bush.
Las estimaciones publicadas por la Organización
de Naciones Unidas (ONU) la sema-na pasada indican que más de 40
millones de personas en todo el mundo están infectadas con el VIH
y la gran mayoría de ellas se concentran en el área del Africa
subsahariana.
En 2002, el sida habrá matado a 3.1 millones de
personas, mientras que 5 millones más se habrán infectado,
según cálculos de Naciones Unidas. Por desgracia, el virus
se extiende en regiones del mundo donde parece podría transformarse
en una epidemia con dimensiones de desastre a nivel global. El virus presenta
además una alarmante capacidad de adaptarse y desarrollar una resistencia
hacia las medicinas empleadas, complicando así las investigaciones
para crear una vacuna.
Los países de Europa del este y Asia central, con
1.2 millones de contagios, presentan un crecimiento alarmantemente rápido
de la epidemia, mientras que las instituciones internacionales temen que
países como China e India sean como bombas en la expansión
del sida.
Mujeres, la mitad de los infectados en el mundo
En todo el mundo, según la ONU, la mitad de los
infectados por el sida son mujeres, lo que significa que los bebés
que nazcan de ellas podrían estar infectados. Para comprender lo
terrible que puede llegar a ser el sida, el sur de Africa es un ejemplo:
casi 30 millones de personas están infectadas con el VIH. La producción
de alimentos está decreciendo debido a la terrible sequía
y al hecho de que los agricultores están muriendo. Millones de niños
se han quedado huérfanos y los espacios que ocupan los cementerios
se amplían y la esperanza de vida cae.
"Ya no hay distinción entre aquellos que conviven
con el VIH y el sida y los que no", dijo el vicepresidente de Sudáfrica,
Jacob Zuma, en un discurso oficial. "Ahora todos vivimos con la enfermedad
y nos vemos afectados de muchas maneras." Los tratamientos actuales se
ven restringidos a unos pocos privilegiados por sus altos costos.
La ONU advierte sobre la educación necesaria que
debe darse a la gente sobre cómo convivir con el sida y cómo
se transmite, para evitar la expansión.
China, país que ha sido muy criticado por ignorar
una importante amenaza latente para la salud de su población, marcó
el comienzo del Día Mundial contra el Sida al poner en marcha una
campaña de advertencia y prevención contra la enfermedad.
Las campañas parecen ser un signo de que Asia podría
finalmente estar lista para superar tabúes sociales, al hablar sobre
actividades sexuales en público en muchas regiones de los países
del lejano oriente, donde viven cinco de cada ocho personas que habitan
el planeta. Incluso así, dicen los expertos, los esfuerzos para
educar a la gente sobre cómo se extiende la enfermedad y cómo
relajar el profundo arraigo social sobre ciertas ideas que impiden tomar
medidas puede llegar demasiado tarde para impedir una rápida expansión
de la enfermedad.
India, el segundo país más poblado después
de China, tiene al menos 4 millones de infectados. En septiembre, la diminuta
isla de Vanuatu -que es una nación-, se vio totalmente perturbada
al confirmarse su primer caso de sida. Tanto, que su primer ministro, Edward
Natapei, hizo un anuncio nacional de este caso. Los pronósticos
para esta zona del mundo son terribles.
La Agencia Central de Inteligencia (CIA) de Estados Unidos
calcula que en apenas siete años, para 2010, India tendrá
el mayor número de infectados por el VIH del mundo, una cifra que
se situaría entre 20 y 25 millones. China, según la CIA,
tendría entre 10 y 20 millones de personas infectadas.
La ONU señala que toda la región de Asia
y el Pacífico tiene en este momento cerca de 7.2 millones de personas
contagiadas.
Los porcentajes de la población de Asia con el
VIH son mínimos, en la mayoría de los casos por debajo de
1.0 por ciento, si se comparan con los desolados países del Africa
subsahariana.
Lo que realmente alarma a los expertos es que la enfermedad
está en un punto que parece suponer una "explosión" que se
expande desde los grupos sociales tradicionalmente vulnerables, como los
homosexuales y drogadictos que comparten agujas y tienen un alto índice
de afectados, hacia la población en general, sin distinción.
"La experiencia en todos los países es que cuando
hay subgrupos como esos en los que prevalece la enfermedad, interactúan
con el resto de la población en algún momento", indicó
Siri Tellier, representante de Pekín en el Fondo de Población
de la ONU.
Las cifras del flagelo en América Latina
Un total de 1.9 millones de adultos y niños tienen
el VIH en América Latina, 440 mil de ellos en el Caribe, que es
la segunda zona más azotada por el mal en el mundo, después
del Africa subsahariana, según datos difundidos por Naciones Unidas.
En Cuba, las autoridades sanitarias desplegaron este domingo
una masiva campaña informativa para prevenir el sida en la isla.
Avisos en radio y televisión recomendaron el uso de preservativos
y advirtieron sobre las formas de propagación del VIH.
En Chile, organizaciones vinculadas a los programas contra
el sida llamaron a la población a no discriminar a los portadores
de VIH.
En Perú, las autoridades cerraron los actos por
el Día Mundial contra el Sida con una caminata juvenil "por la vida"
en la que participaron centenares de jóvenes y deportistas.
En Honduras, el presidente Ricardo Maduro participó
de un evento en el Estadio Nacional de Tegucigalpa, donde culminó
una caminata de unas 400 personas entre funcionarios, empresarios, estudiantes
y representantes de organizaciones no gubernamentales que trabajan con
portadores de VIH.