Según un juez, el dueño de la discoteca es responsable de homicidio culposo, no doloso

Integrarán nuevo expediente sobre el caso Lobohombo

SUSANA GONZALEZ G.

La Fiscalía Desconcentrada de la Procuraduría de General Justicia del Distrito Federal (PGJDF) en la delegación Cuauhtémoc, integra nuevamente la averiguación previa sobre la muerte de 22 personas ocurrida hace dos años luego del incendio en la discoteca Lobohombo. Lo anterior tras de que un juzgado federal determinó que Alejandro Iglesias Rebollo, dueño del establecimiento, es responsable de homicidio culposo y no doloso como lo determinó el Ministerio Público, manifestó el procurador Bernardo Bátiz.

Gracias a la determinación del juzgado sexto de distrito "A" en materia de amparo, ratificada por el primer tribunal colegiado en materia penal del primer circuito, Iglesias Rebollo obtuvo dos amparos que imposibilitan a la PGJDF cumplir con las órdenes de aprehensión en su contra por homicidio y lenocinio, giradas por los juzgados 9 y 49 de los reclusorios Norte y Oriente.

El expediente del caso fue devuelto a la PGJDF y la dependencia, mediante la Fiscalía en Cuauhtémoc, tendrá que recabar nuevos elementos para volver a consignar el expediente, pero con las características de homicidio culposo, con la intención de solicitar otra orden de aprehensión contra Iglesias Rebollo, a quien también se identifica como integrante del grupo Titanium, dijo Bátiz.

No obstante, el procurador insistió en que pese a la determinación de los juzgados citados, Iglesias Rebollo pudo prevenir el accidente en la discoteca de Insurgentes Centro, el 20 de octubre de 2000, si hubiera cumplido con las disposiciones en materia de accidentes, pero en cambio sólo simulo puertas y tomas de agua.

"El caso sigue abierto", pero el expediente se está rehaciendo, sentenció Bátiz, antes de participar en el banderazo de salida de los miles de corredores en el Maratón de la Ciudad de México.

Por su parte, la delegada en Cuauhtémoc, Dolores Padierna, condenó la decisión judicial al advertir que se corre el riesgo de que Iglesias Rebollo nunca pise la cárcel: "a dos años de la tragedia observamos que las leyes son muy blancas y permiten que los grandes delincuentes anden libres. No estoy de acuerdo en que se le cambie la acusación de homicidio doloso a culposo porque sería tanto como darle derecho a fianza y que nunca llegue a la cárcel, sería darle carpetazo al asunto".

Recordó que justo a raíz del siniestro en ese centro nocturno de la colonia San Rafael, la delegación ha clausurado 234 centros nocturnos de alto impacto, de los cuales la mayoría, es decir 117, ya regularizaron su situación, mientras que otros 60 prefirieron abandonar la demarcación por lo que se les retiró su permiso de operación.

No obstante reconoció que pese a las clausuras, ha habido casos en que los dueños de dichos establecimientos pretenden seguir operando, "pero en cuanto nos quitan un sello, lo volvemos a poner", y refirió que en un solo centro de la Zona Rosa han tenido que reponerlo hasta 75 veces. A esto se suman los juicios de amparo interpuestos por los empresarios, una batalla legal que las autoridades también ha ido ganando, pues dijo que de 400 juicios, sólo siete casos han logrado el amparo.

La delegación ha solicitado al jefe de Gobierno, Andrés Manuel López Obrador, que sea expropiado el predio donde todavía persisten las ruinas de Lobohombo para que se construya una central de bomberos en la zona, pues la más cercana es la que se encuentra en la avenida Fray Servando Teresa de Mier, en la delegación Venustiano Carranza.