Laboran 300 personas
Filial de Televisa cierra instalaciones por conflicto sindical
FABIOLA MARTINEZ
La empresa Sistema Telefónico de Atención y Respuesta (STAR), filial de Televisa, cerró sus instalaciones en las que laboran poco más de 300 empleados, quienes votaron a favor de afiliarse a un sindicato independiente.
De acuerdo con la versión de los trabajadores de STAR -antes Merkatel, que brinda servicios de mensajería por radiolocalizadores-, el 31 de julio pasado los ejecutivos de esta compañía cerraron, sin previo aviso, sus instalaciones ubicadas en Insurgentes Sur 694, al tiempo que "invitaron" a 50 trabajadores a aceptar su "renuncia voluntaria" con finiquitos inferiores a lo establecido en la ley.
Desde hace dos años, señalan, la empresa mantenía congelados los salarios y operaba en condiciones precarias de empleo, con la colaboración de un sindicato afiliado a la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC).
Ante ello, los empleados -afiliados al Sindicato de Trabajadores y Empleados de Empresas del Comercio en General del Distrito Federal- gestionaron un proceso de recuento en el que nombraron a la organización que habría de representarlos. El sindicato de la CROC no obtuvo ningún voto.
Fue entonces, agregan los empleados, cuya organización está afiliada a la Unión Nacional de Trabajadores, cuando la empresa "desplazó" sus instalaciones a Insurgentes Sur 1677, y actualmente labora con gente que no forma parte del sindicato.
El pasado jueves, la Junta Local de Conciliación y Arbitraje emitió su laudo en favor del sindicato unetista, con lo que ahora son los titulares del contrato colectivo. La próxima semana emplazarán a huelga a la empresa en cuestión. En tanto, los trabajadores se mantienen en guardia en las instalaciones de origen para defender su fuente de ingresos y "obligar a la empresa a negociar salario y prestaciones con nosotros", dijo Claudia Bermúdez, dirigente sindical de los empleados.