Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Sábado 10 de agosto de 2002
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Capital
El conflicto laboral en el Metro responde a intereses electorales del PRI, asegura

No cederá el GDF a presiones de líderes charros: López Obrador

En curso, las denuncias contra los dirigentes del Sindicato Metropolitano: Alejandro Encinas

ELIA BALTAZAR

La ciudad de México y su gobierno "no serán rehenes de grupos e intereses políticos personales o de partido, por perversos o poderosos que sean", advirtió ayer el jefe del Ejecutivo local, Andrés Manuel López Obrador, en relación con el paro en las líneas 9 y B del Metro, que encabezó el dirigente sindical y legislador priísta Fernando Espino Arévalo, "el mandamás" de ese gremio durante 22 años.

López Obrador responsabilizó al PRI de la acción emprendida el jueves por el sindicato de trabajadores del Metro y aseveró que "no vamos a ceder ante presiones de grupos o de dirigentes charros, ni aceptaremos ninguna negociación que implique protegerlos". Pidió paciencia y comprensión a los ciudadanos, porque "si cedemos, se apropian del gobierno las mafias".

Durante su conferencia de prensa matutina, el jefe de Gobierno aseguró que la inconformidad del sindicato del Metro tiene como razón de fondo intereses político-electorales del PRI.

Se trata, agregó, de una "lanzada" contra el gobierno capitalino, pues no tienen motivos laborales ni interés por la seguridad en la operación del Metro para justificar el paro que realizaron, que no es otra cosa que una maniobra de "la mafia y el hampa de la política" para atacar a la administración local. A esos líderes, aseguró, lo único que les interesa es mantener sus "canonjías" y seguir sacando provecho.

Advirtió: "Me doblo pero no me quiebro, y si me buscan me van a encontrar, porque no estamos atados ni cruzados de brazos". De nada sirve el cambio, aseveró López Obrador, "si siguen los charros y los caciques dominando y engordándose del presupuesto". Ojalá, agregó, que los trabajadores del Metro entiendan que están siendo manipulados por intereses partidistas.

El jefe de Gobierno dijo que mantendrá informada a la población sobre el curso que tomen las negociaciones con el sindicato del Metro, porque nada se acordará "en lo oscurito ni con la mafia política". Agregó que no dará motivos para que digan que su administración actúa de manera autoritaria o que toma represalias. "No vamos a caer en ninguna trampa en este asunto político".

López Obrador aseguró que su principal preocupación es garantizar el servicio de transporte, pues son los ciudadanos los que "están pagando los platos rotos".



LAURA GOMEZ FLORES

El subsecretario de Gobierno, Alejandro Encinas Rodríguez, señaló que las denuncias penales contra la dirigencia del Sindicato Metropolitano por la toma de las líneas 9 y B del Metro siguen su curso y no están a negociación.

Agregó que la intención de las autoridades capitalinas es reiniciar el próximo lunes las pláticas en torno a las demandas laborales, a las cuales ya confirmó su asistencia el secretario general del sindicato, Fernando Espino Arévalo. "No tenemos ningún impedimento ni actitud para dejar de cumplir (con las prestaciones), cuando es nuestra responsabilidad, pero, por supuesto, los asuntos políticos los vamos a enfrentar".

Al término de una reunión de gabinete con miras a diseñar un programa emergente para garantizar la continuidad del servicio ante un paro laboral en las 11 líneas del Metro -decisión que se tomaría en un congreso general de delegados-, Alejandro Encinas consideró que la reciente movilización tendrá un alto costo político, "porque fue errático, los trabajadores no sacaron nada y se afectó a un sector muy amplio de la población".

Expresó la determinación de "dar la pelea, porque no vamos a aceptar ningún chantaje ni ninguna presión de ese tipo; de no regatear nuestras responsabilidades contractuales y menos negociar las averiguaciones previas levantadas en contra de algunos representantes a cambio de que no cierren el Metro".

Señaló que el dirigente Espino Arévalo "está abusando de su posición, tanto en su propósito de dirigir el Partido Revolucionario Institucional en el Distrito Federal, como en su relación con el presidente nacional de esa agrupación política (Roberto Madrazo), y la ciudad no puede ser rehén de las aspiraciones personales, por legítimas que sean, de ninguna persona".

Espino Arévalo dio un plazo de una semana, después del encuentro que tendrá con el secretario y el subsecretario de Gobierno, José Agustín Ortiz Pinchetti y Alejandro Encinas, y con el director del Metro, Javier González, para que resuelvan su pliego petitorio. De lo contrario convocará a un congreso de delegados para analizar la posibilidad de suspender el servicio del Metro por un día.

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