El magistrado chileno pide que comparezcan Kissinger y el cónsul de EU en 1973
Declaró ante el juez Guzmán la viuda del periodista estadunidense asesinado por agentes pinochetistas
Charles Horman fue fusilado después de denunciar la participación de la CIA en el golpe
AFP, DPA Y PL
Santiago, 10 de julio. Nuevos testimonios fueron presentados hoy ante la justicia chilena por el asesinato del periodista estadunidense Charles Horman, fusilado por agentes de la dictadura pinochetista en 1973, con la aportación de "valiosos" antecedentes entregados por la viuda Joyce Horman para esclarecer el crimen.
El abogado de la estadunidense, Sergio Corvalán, indicó que entre los testimonios presentados ante el juez Juan Guzmán destacan nuevos antecedentes respecto de las investigaciones en Estados Unidos y Chile, muchos de ellos procedentes de documentos desclasificados de los archivos de la Agencia Central de Inteligencia (CIA).
Entre esos datos, dijo a la televisión local, sobresalen los referidos a indagaciones he-chas por diplomáticos del país del norte, cuyos antecedentes podrían permitir al magistrado determinar eventuales responsabilidades de la embajada de Estados Unidos en Santiago en la muerte del periodista, fusilado en el Estadio Nacional.
El asesinato de Horman, quien estaba radicado en Chile en 1973 cuando se produjo el golpe de Estado y buscaba nexos entre los golpistas y su país, inspiró la película Missing (1982), del cineasta greco-francés Constantino Costa-Gravas.
Incluso se supo que Costa-Gravas, quien había sido invitado a comparecer por Guzmán, postergó su visita para declarar ante el juez por el mismo asesinato de Horman.
Charles Horman fue capturado por agentes chilenos el 17 de septiembre de 1973, a los pocos días del sangriento golpe militar contra el presidente constitucional Salvador Allende, y su captura se dio luego de que denunciara una serie de actividades de la CIA contra el gobierno allendista.
Guzmán, como magistrado que instruye la causa, había invitado a Costa-Gravas, a Joyce Horman y al ex jefe del campo de prisioneros que funcionó en el Estadio Na-cional, coronel retirado Jorge Espinoza, pa-ra ver todos juntos el filme del cineasta.
Se esperaba también la asistencia del ex cónsul estadunidense de la época, James Purdy, declarante en calidad de imputado.
Sin embargo, el juez no podrá contar ya con el cineasta ni cumplir con su objetivo de formularle las 60 preguntas que le tenía preparadas sobre la causa que investiga.
De momento sólo ha llegado Joyce Horman, quien será homenajeada este jueves en el Congreso Nacional, en un acto organizado por el Colegio de Periodistas.
El testimonio de la viuda de Horman se enmarca en la nuevas diligencias ordenadas por Guzmán, que incluye una solicitud para interrogar como testigo al ex secretario estadunidense de Estado, Henry Kissinger.
El pasado 27 de junio el juez fijó un plazo de 40 días para que Kissinger responda vía exhorto a 30 preguntas que buscan aclarar su participación en los hechos.
Sin embargo, Estados Unidos se ha negado siempre a que Kissinger preste testimonio judicial en otros países, como ocurrió recientemente en Francia.