Diputado panista propone crear mesa interinstitucional

Piden a Creel atender problemas limítrofes para evitar masacres

Disputas por recursos naturales en varias regiones, advierte

De no resolverse problemas de límites territoriales, disputas por la explotación de bosques, selvas y reservas minerales, así como el rezago agrario que persiste, podrían desencadenarse conflictos sociales entre grupos indígenas de Chiapas, Zacatecas, Durango, Chihuahua, Morelos, Jalisco y estado de México, entre otras entidades, alertó el diputado panista Gumercindo Alvarez Sotelo.

En este sentido, hizo un llamado al titular de Gobernación, Santiago Creel, para que convoque a una mesa interinstitucional que permita resolver dichos conflictos y evite más masacres, como la ocurrida en mayo pasado en el paraje Agua Fría, en Oaxaca.

Alvarez Sotelo, miembro de la Comisión de Asuntos Indígenas de la Cámara de Diputados, dijo que es urgente que en este proyecto participen las secretarías del Medio Ambiente, Agricultura y de la Reforma Agraria, para que conjuntamente con los gobiernos estatales y sus congresos locales "establezcan un programa nacional que resuelva los problemas limítrofes entre las entidades federativas y los municipios del país, así como entre las comunidades indígenas, y de esa manera prevenir problemas que puedan dar origen a conflictos sociales.

"Los tres niveles de gobierno están obligados a brindarles el apoyo necesario a los grupos étnicos, para que sean ellos los vigilantes de esas zonas y así poderlas conservar y preservar de la tala indiscriminada, ya que actualmente muchas de estas reservas ecológicas están en peligro de extinción", insistió.

Alertó a las autoridades para que "vuelvan la mirada hacia esos focos rojos que actualmente existen en México", ya que "el problema de límites territoriales entre estados y municipios que se disputan diversos recursos naturales, principalmente las zonas boscosas y acuíferas, está presente en varias regiones del territorio nacional".

En la actualidad, explicó, se calcula que del total de madera extraída de los territorios indígenas, principalmente de los bosques de coníferas, sólo 40 por ciento se utiliza con fines comerciales. "Chihuahua, Durango, Michoacán, Guerrero y Oaxaca son las entidades donde la explotación del recurso es más marcada. Del 60 por ciento restante, aun cuando no se cuenta con información fidedigna, 40 por ciento se obtiene de manera clandestina. El producto está destinado a la producción de celulosa y el resto forma parte del desperdicio, por no contarse con la tecnología apropiada para su total aprovechamiento", agregó.

El legislador panista comentó que México cuenta con 21 millones 888 mil hectáreas en superficie de bosques en territorios indígenas, además de 18 millones de hectáreas de superficie de selvas, en tanto que la población india -más de 10 millones de personas- se encuentra asentada en todas las entidades federativas. Sin embargo, 90 por ciento de esta población vive en las regiones biogeográficas más ricas, que son el trópico húmedo, el trópico seco y zonas templadas, donde las vetas madereras se dan en gran proporción.

"Las principales zonas de reserva ecológica protegidas y regiones con agua, bosques, selvas, recursos naturales y minerales se ubican justamente en los territorios donde están asentadas las comunidades indígenas. Para estas comunidades el vínculo entre hombre y tierra es el más importante; el respeto al agua, a los bosques, a la fauna ha hecho que no pierdan sus tradiciones, porque para ellos los elementos naturales son parte de una divinidad que respetan, le temen y en la que sustentan su supervivencia", expresó.

En ese sentido, mencionó que en México hay 127 áreas naturales protegidas, 51 en zonas con fuerte presencia indígena, que involucran a 48 municipios. Además, 22 por ciento de la fuerza laboral nacional se dedica a la agricultura, la cual, de acuerdo con la encuesta nacional sobre empleo en zonas indígenas de 1997, es la principal rama de actividad en las comunidades indias, en la que participa 70 por ciento de la población ocupada.

CIRO PEREZ SILVA