Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Sábado 22 de junio de 2002
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Deportes
Estamos destrozados, declaró el primer ministro Tony Blair

Tristeza y decepción entre aficionados ingleses

 AGENCIAS

Londres 21 de junio. Inglaterra quedó sumida en el dolor cuando su selección quedó eliminada por Brasil, equipo al que nunca ha podido derrotar en mundiales.

"Esto es una tragedia. No hay otra palabra para calificarlo" dijo una estudiante de 19 años mientras secaba sus lágrimas con la bandera nacional.

El país se paralizó durante el partido. Hasta 5 millones de personas abarrotaron los pubs a pri

meras horas de la mañana para ver el encuentro.

Según estimaciones del periódico Daily Mirror más de la mitad de los 60 millones de británicos estaban sentados frente al televisor para no perderse el llamativo juego.

Algunos grandes supermercados se proveyeron de pantallas gigantes al suponer jugosas ganancias por la venta de cerveza, que se incrementó ciento por ciento, así como de la demanda de snacks, preservativos y medicamentos para el dolor de cabeza.

Las escuelas también alquilaron grandes pantallas para que los alumnos pudieran seguir las incidencias del encuentro.

Miles de hinchas se congregaron desde la medianoche en la Plaza Trafalgar Square de Londres y los bares estuvieron repletos de hinchas.

Los lamentos sucedieron a los vítores a medida que cambiaba la suerte inglesa durante el partido. La dispersión fue rápida y silenciosa, en total ambiente de funeral. Otros prefirieron ahogar la pena con cerveza bajo la mirada atenta de grupos de policías.

La reina Isabel II hizo parar las carreras de caballos de Ascot, mientras el príncipe Guillermo, hijo de Carlos y la difunta Lady Di, esperaba un triunfo como regalo de su cumpleaños 20. La gran fiesta planeada se redujo a una breve reunión con sus allegados.

Cada quien vivió su tragedia. Un apostador de Birminghan, cuyo nombre no se reveló, había jugado cien mil libras esterlinas a que Inglaterra sería campeón del mundo. Fue uno de los británicos con mayor motivo para sentirse deprimido.

El primer ministro Tony Blair declaró en Sevilla, España: "Estamos todos destrozados, eso está claro", pero se declaró orgulloso de los jugadores y elogió la conducta de los aficionados que viajaron a Japón. 

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