Lo inauguró López Obrador; participan
600 jóvenes internos
En marcha, programa de readaptación de primodelincuentes,
en el Reclusorio Oriente
ANGEL BOLAÑOS SANCHEZ
El jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés
Manuel López Obrador, inauguró ayer en el Reclusorio Oriente
el Programa de Rescate y Reinserción de Jóvenes Primodelincuentes,
en el que participarán 600 internos.
Jóvenes
de entre 18 y 29 años que se encuentran presos por primera vez,
sin problemas de adicciones y procesados por delitos no graves, se mantendrán
aislados de la población reincidente y de alta peligrosidad, para
evitar que se contaminen. Estarán en instalaciones limpias
y con acceso permanente a talleres de reinserción sociofamiliar,
proyecto de vida, prevención de adicciones, actividades laborales
que les permitan percibir ingresos, así como deportivas, culturales
y recreativas.
Sin embargo, Sabás Cruz Soto, dirigente del Colectivo
Pro Derechos Humanos de Presas y Presos Heberto Castillo, advirtió
que los empleados de custodia que la organización denunció
en la Penitenciaría de Santa Marta Acatitla por controlar la venta
de drogas y extorsionar a los presos, "son los mismos que están
por acá".
López Obrador dijo que con este programa se empieza
a atender una deuda pendiente del gobierno de la ciudad con los jóvenes,
que son víctimas de un sistema social injusto y desigual, pues su
generación ha vivido inmersa en crisis económicas recurrentes.
Las cárceles, señaló, tienen que
ser verdaderas escuelas de readaptación y no todo lo contrario.
"Nada más se castiga al que no tiene con qué comprar su inocencia
y siguen libres los que han saqueado el país", comentó.
Cifras de la Dirección General de Prevención
y Readaptación Social del GDF refieren que de los 22 mil 800 internos
en los ocho centros de reclusión,12 mil 679 tienen entre 18 y 30
años. El Reclusorio Oriente cuenta con una población de 8
mil 87 internos, de los cuales 4 mil 997 son menores de 30 años,
población que "al ingresar y no contar con las condiciones apropiadas
de tratamiento, sufre un proceso de contaminación y degradación
que dificulta su reincorporación a la sociedad".
El subsecretario de Gobierno, Alejandro Encinas Rodríguez,
destacó que por primera vez se hace una clasificación criminógena
de los presos conforme lo establecen la legislación local y los
tratados internacionales en materia de tratamiento de delincuentes, suscritos
por México.
Se trata, aseguró, "del primer paso que se da en
el proceso de reforma del sistema penitenciario del Distrito Federal".
Por primera vez los internos no vivirán hacinados
en sus estancias, diseñadas para seis internos cada una; todas disponen
de excusado y lavabo; en el área hay una tienda, canchas de basquetbol
y talleres con un anexo escolar y biblioteca.
Federico Feria Castillo, quien habló en nombre
de los 600 internos incorporados al programa, comentó que estar
dentro de éste no es un privilegio, sino un compromiso y "la oportunidad
de incorporarnos a la sociedad con dignidad y respeto".