Instalación de Táboas

Silvestre recrea un jardín que había en la sala Siqueiros

MERRY MAC MASTERS

La instalación Silvestre, de Sofía Táboas (DF, 1968), realizada con 400 rejas de flores se refiere al tiempo en que era un jardín el actual ''cubo" de la Sala de Arte Público Siqueiros. Cuando el recinto de Tres Picos 29, Polanco, era casa del muralista, tenía un espacio al aire libre en medio de la construcción. Después esa área se techó y adaptó como sala de exhibición.

Luego de la remodelación de sus instalaciones, uno de los proyectos de esa sala consiste en invitar a artistas para trabajar básicamente en ''el cubo". Mucho de lo que hace Táboas es para sitio específico. En varias ocasiones ha trabajado con plantas naturales y por lo general con tierra. Entonces, se le ocurrió hacer un ''campo" en el lugar original del jardín. Silvestre se remite a esa vida vegetal que albergaba el espacio, sin reproducirla.

Para su instalación, Táboas retacó de margaritas y claveles, de larguísimos tallos, así como otras variaciones de esa flor el área de 90 metros cuadrados y siete metros de altura. El día que se abrió al público, Silvestre lucía fresca y con vivo colorido.

Táboas explica: ''Quería ocupar todo el espacio y sentir esa sensación de campo o paisaje, a la manera de un close-up. La obra, además, se irá transformando con el tiempo, ya que no tiene agua ni tierra. Esa multitud de flores y de maleza va a enfatizar esa transformación porque cada semana la obra va a ser distinta. Al final, no sabemos cómo va a acabar. A lo mejor se descubre la enramada que hay abajo. Es parte del proceso de la pieza".

A diferencia de trabajos anteriores, en los que la planta sufrió el proceso de transformación, pero por su crecimiento, en Silvestre la naturaleza simplemente se va muriendo. Contrario a lo que podría parecer, Táboas no maneja ningún simbolismo: ''Es más como algo que se cambia, se metamorfosea, se modifica", asegura.

(La instalación Silvestre concluirá exhibición el 23 de junio.)