"Ya habíamos purgado nuestras condenas", señalan
Descartan "señal de buena voluntad" en la liberación de presos zapatistas
DE LOS CORRESPONSALES
El abogado de los zapatistas recién liberados, Miguel Angel de los Santos, negó que la excarcelación del jueves haya sido una señal de buena voluntad del presidente Vicente Fox, pues asegura que los tres habían alcanzado el beneficio de la libertad desde hace varios meses.
Fuera de la prisión, Rafael López Santiz, Gustavo Estrada Gómez y Alejandro Méndez Díaz coincidieron en que su excarcelación "no se dio por la voluntad política del gobierno federal", como éste "lo quiere hacer creer, pues ya habíamos pagado nuestras condenas, según el Código Penal federal y las normas mínimas del mismo".
Tanto el abogado como los excarcelados solicitaron que el gobierno cumpla cabalmente las tres condiciones que el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) reclama desde diciembre de 2000 para reiniciar el diálogo de paz, entre ellas la libertad de zapatistas que aún permanecen en cárceles de Tabasco y Querétaro.
Quienes aún permanecen recluidos son indígenas de la etnia chol originarios del municipio de Tila. Carrillo Vázquez López se encuentra preso en el penal de Villahermosa, mientras que Francisco Pérez Vázquez y Angel Concepción Pérez Gutiérrez -padre e hijo- están en la penitenciaría de de Macuspana.
Del 11 al 14 de mayo los tres realizaron un ayuno para pedir su liberación o al menos ser trasladados a la prisión ubicada en Yajalón, Chiapas, "para estar cerca de sus familiares". El primero fue acusado por militantes del grupo Paz y Justicia del delito de violación. Los otros dos fueron sentenciados por los delitos de homicidio y despojo, presuntamente en agravio de un terrateniente de Tabasco.
Este viernes, en Villahermosa, las organizaciones que conforman el Comité Popular Ciudadano anunciaron que se reunirán el domingo, con el objetivo de acordar estrategias para lograr que las autoridades de Tabasco liberen a los tres indígenas.
Desde febrero de 1998, en el penal de Querétaro se encuentran también recluidos Anselmo Robles y Gerónimo Sánchez, acusados de despojo (delito del fuero común), considerado como grave en la legislación local, por lo que no tienen derecho a libertad bajo fianza.
Además, enfrentan un proceso judicial federal relacionado con las agresiones que sufrieron integrantes del gabinete del entonces presidente Ernesto Zedillo, el 5 de febrero de 1998, a la salida del Teatro de la República, después de la conmemoración de un aniversario más de la promulgación de la Constitución mexicana.
El gobernador queretano Ignacio Loyola Vera nunca los ha reconocido como presos políticos. Además, ha dudado del presunto vínculo de los reclusos con el EZLN, aun cuando fueron incluidos en las listas del grupo rebelde de quienes exigía su liberación.
El secretario de Gobierno estatal, Bernardo García Camino, afirmó a inicios de la semana pasada que no existe hasta el momento ninguna relación con la Secretaría de Gobernación o con la Comisión de Concordia y Pacificación (Cocopa) para negociar la posible liberación de los presos zapatistas.
"Manejo político"
El abogado Miguel Angel de los Santos sostuvo que la liberación tardía de Rafael López Santiz, Alejandro Méndez Díaz y Gustavo Estrada Gómez, ocurrida en Tuxtla Gutiérrez y San Cristóbal de las Casas, Chiapas, refleja el manejo político que los gobiernos del estado y federal realizan con los casos de los presos del EZLN.
Recuerda que Rafael López Santiz fue considerado por el Instituto Nacional Indigenista para ser liberado desde noviembre pasado. En marzo de este año, según el instituto, ellos se reunieron con funcionarios de la Dirección de Prevención y Readaptación Social, y nuevamente Rafael estuvo a punto de ser liberado, sólo esperaban el estudio técnico por parte de autoridades de la cárcel de San Cristóbal de las Casas, donde se encontraba preso.
"Los casos de Gustavo Estrada Gómez y Alejandro Méndez Díaz, presos en la cárcel de Cerro Hueco, se encontraban en similar situación a la Rafael, porque su liberación dependía de trámites administrativos realizados por autoridades penitenciarias", puntualizó.
El litigante negó también que la liberación de los tres simpatizantes del EZLN haya sido resultado de las negociaciones de la Cocopa con el gobierno chiapaneco, que encabeza Pablo Salazar Mendiguchía.
De los Santos recordó que en las cárceles de Chiapas existen al menos 80 indígenas y campesinos que también se reivindican como injustamente detenidos, y por ello se sienten merecedores de la libertad.
"El gobierno federal asumió el compromiso de cumplir tres señales mínimas que le demandó el EZLN para iniciar contactos con el representante gubernamental; sin embargo, esas señales reclamadas no pueden entenderse como cumplidas a cabalidad", insistió.
Sobre la señal relacionada con la ley de derechos y cultura indígenas indicó que no se considera cumplida puesto que aunque se aprobó una ley, ésta no refleja los acuerdos firmados en San Andrés.
Respecto del reposicionamiento militar comenta que el Ejército Mexicano se retiró de las siete posiciones reclamadas, pero esto no se tradujo en la disminución del número de tropas. Es más, agregó, hoy día las comunidades indígenas han venido denunciando la instalación de nuevos campamentos castrenses y el aumento de los patrullajes y del hostigamiento a los pobladores.
Opinión de los excarcelados
Por separado, los tres zapatistas liberados el jueves afirmaron que su excarcelación "no se dio por la voluntad política del gobierno federal", como éste "lo quiere hacer creer, pues ya habíamos pagado nuestras condenas, según el Código Penal federal y las normas mínimas del mismo".
En conferencia de prensa efectuada en San Cristóbal de las Casas, Rafael López Santiz, Gustavo Estrada Gómez y Alejandro Méndez Díaz leyeron un documento en el que señalan que "el gobierno federal no debería decir que con nuestra liberación se está cumpliendo una de las tres condiciones que puso el EZLN para reconstruir un diálogo verdadero".
Por lo mismo, añadieron, "le seguimos exigiendo al gobierno federal las acciones necesarias para la paz, que siguen hoy tan simples como lo fueron desde el primero de diciembre del 2000: la liberación de los presos políticos zapatistas y el reconocimiento constitucional de la ley Cocopa".
Reiteraron que su encarcelamiento fue "injusto", y que el presidente Vicente Fox Quesada "jugó con nuestra libertad por más de año y medio, situación que se tornó una tortura a partir del mes de abril, en que comenzó a publicitarse nuestra salida".
Al afirmar que al ser liberados ya habían cumplido 90, 60 y 50 por ciento de sus respectivas condenas, Rafael, Gustavo y Alejandro afirmaron que mientras no sean excarcelados los otros cinco zapatistas que están presos en Tabasco y Querétaro, el gobierno federal muestra que "no hay interés legítimo en cumplir las señales necesarias para un diálogo verdadero".
Al comenzar la conferencia, Rafael López Santiz dijo que al regresar a sus comunidades continuarán con la lucha, hasta que el gobierno reconozca los derechos de los pueblos indígenas. "Vamos a seguir apoyando a nuestros hermanos hasta que haya un gobierno más democrático".
Añadió que "si no hay diálogo, tenemos que buscar otro camino", pues "morir no es nada cuando la patria se está muriendo".
Dijo que durante su estancia en los penales de Cerro Hueco y San Cristóbal -"donde me enfermé y estuve a punto de morir porque no había medicinas"-, se dio cuenta que "los ricos nunca van a la cárcel; llegan hasta la puerta, sacan sus fajos de billetes y salen libres". En las cárceles, abundó, 90 por ciento de los prisioneros son indígenas.
Gustavo Estrada pidió a la sociedad civil "no dejarse engañar, pues el gobierno tratará de hacer creer que nuestra liberación es parte de las tres señales del EZLN, pero eso es mentira".
Por último, se debe señalar que durante esta administración estatal se habría encarcelado en Chiapas a por lo menos otros 17 "zapatistas"; sin embargo, éstos no han sido reconocidos por la comandancia del EZLN y por ello no entrarían dentro de las tres señales reclamadas por el grupo armado.
ANGELES MARISCAL, ELIO HENRIQUEZ, JUAN BALBOA, RENE LOPEZ Y ALEJANDRO GONZALEZ, CORRESPONSALES
