El informe de PGR confirma que la "confusión
queda descartada", dice diputado panista
Lima Malvido: se reabrió el caso Posadas por
omisiones en pesquisas
Adquiere fuerza la línea de investigación
sobre un tercer grupo participante el día de los hechos
JESUS ARANDA
Al cumplirse ayer el noveno aniversario del asesinato
del cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo, la subprocuradora María
de la Luz Lima Malvido confirmó la decisión de reabrir las
indagaciones, luego de que "se detectaron omisiones en diligencias y anomalías
cometidas por servidores públicos encargados de realizar las investigaciones",
así como la detención reciente de personajes involucrados
en el homicidio, y la petición expresa de autoridades religiosas
y del gobierno de Jalisco.
A su vez, Fernando Guzmán Pérez Peláez,
ex secretario de Gobierno de Jalisco, aseguró que el informe presentado
por la Procuraduría General de República (PGR) confirma que
el complot constituye una de las líneas principales de investigación,
y que "la confusión queda descartada" y se retoma la línea
de un tercer grupo que participó en los hechos.
En su calidad de coadyuvante, en representación
del llamado grupo Jalisco, el actual diputado local aseguró que
la PGR tiene varias líneas de investigación sobre quién
fue el autor, "desde qué altura se ordenó el crimen y cuáles
fueron las participaciones de instancias públicas en el asesinato
del cardenal".
Visiblemente nerviosa
En
conferencia de prensa en la que no se permitieron preguntas y en la que
lucía visiblemente nerviosa, la subprocuradora de Coordinación
General y Desarrollo de la PGR dijo que la reactivación de las averiguaciones
comenzó a partir del 12 de junio del año pasado, y que en
este tiempo se encontraron con la falta de más de mil fojas del
expediente, la "posible" sustracción de material pericial, la pérdida
de la declaración ministerial del ex nuncio Girolamo Prigione, deficiencias
en las investigaciones y "tardanza en la reacción" de las autoridades
encargadas inicialmente del asunto.
Lima Malvido sostuvo en el salón México
de la dependencia que la reapertura del caso no se le comunicó a
la sociedad "para evitar la manipulación de pruebas, la politización
del asunto, o la eliminación de algunos elementos que pudieran ser
importantes para la investigación".
Indicó que en el contexto de "las nuevas rutas
y pistas de investigación" que hay sobre el asunto, se llevarán
a cabo diligencias con autoridades eclesiásticas y personal que
servía en aquel entonces en la Policía Judicial Federal,
en la Policía Federal de Caminos y en la Secretaría de la
Defensa Nacional, entre otros.
Sin mencionar a ningún personaje involucrado en
las pesquisas realizadas en años anteriores ?Jorge Carpizo era procurador
en 1993 cuando ocurrió el homicidio?, Lima Malvido precisó
que entre las deficiencias en las indagatorias se encuentran no tomar la
declaración de parte importante de los involucrados en el crimen,
así como omisiones en la investigación de movimientos y traslados
de personal de la PGR "durante y después de los hechos."
Tampoco se investigó, sostuvo, "la tardanza en
la reacción" por parte de las autoridades en las detenciones el
día de los hechos.
La subprocuradora confirmó lo publicado por La
Jornada el pasado miércoles 23 de mayo, en que se dio cuenta
de la reapertura de la indagatoria y la desaparición de documentación
relevante.
Cabe señalar que aun cuando se pasaron algunas
diapositivas en pantallas gigantes y se colocó un gran recuadro
durante la conferencia, la funcionaria no se detuvo a explicar dicha información,
como tampoco entregó su informe a los medios de comunicación;
sólo leyó un documento que, por cierto, tampoco fue entregado
a la Dirección de Comunicación Social de PGR, la cual tuvo
que transcribir posteriormente sus palabras.
Adelantó que la PGR realizará diligencias
adicionales en los aeropuertos de Tijuana, Guadalajara y la ciudad de México,
para determinar qué fue lo que ocurrió el 24 de mayo de 1993
en la terminal aérea de la capital jalisciense, cuando al filo de
las 15:35 horas fueron asesinados el cardenal Posadas; Pedro Pérez
Hérnández, chofer del prelado; Martín Alejandro Aceves
Rivas, chofer del alcalde de Arandas; José Ramón Flores Flores
y José Rosario Beltrán Medina, escoltas de Joaquín
El Chapo Guzmán -actualmente prófugo-; José
Manuel Vega Rodríguez, y Francisco Rodríguez Cabrera.
Lima Malvido, cuya autoridad moral para investigar el
caso Posadas fue cuestionada el pasado martes por Carpizo McGregor, sostuvo
que el gobierno actual "genera condiciones que permiten y nos obligan a
revisar con imparcialidad, con respeto a la legalidad y mesura los acontecimientos
del pasado".
También dejó en claro que la PGR "debe tener
un sustento probatorio, y si no, desechar la información" que reciba.
Este gobierno tiene autoridad moral, "sin fantasías persecutorias
que nos quiten la neutralidad", agregó.
Aseguró que con la llegada de la presente administración
se creó un grupo técnico que revisó toda la indagatoria
realizada desde 1993; es decir, se revisaron 25 mil 167 fojas, distribuidas
en 61 tomos.
Como parte de las indagatorias -fortalecidas a raíz
de las detenciones de José Humberto Rodríguez Bañuelos,
La Rana; Benjamín Arellano Félix; José Luis
Tirión Muñoz, y Enrique Harari Garduño- se han ubicado
células y grupos organizados "que participaron en los hechos".
Tal es el caso de la integración de células
de los Arellano y de El Chapo Guzmán, así como nombres
y teléfonos de personas probablemente involucradas.
En el marco de la indagatoria se han investigado a mil
784 personas, 824 números telefónicos, 700 domicilios, 194
armas, 177 vehículos y 22 cuentas bancarias.
Por su parte, el diputado jalisciense Fernando Guzmán
Pérez Peláez señaló que "lo que ahora está
haciendo (la PGR) es completar la información y profundizar para
esclarecer el complot".
El legislador jalisciense se refirió a la desaparición
de las declaraciones del ex nuncio Girolamo Prigione del expediente. Indicó
que en el libro de Jorge Carpizo -Muerte de un cardenal, de reciente
publicación- sí aparece la reproducción de dichas
declaraciones, y preguntó, ¿de dónde las sacó,
quién se las entregó y por qué las tiene? Añadió:
"por esto, entre muchas otras maniobras y ocultamientos, hemos presentado
la denuncia sobre la actuación indebida de Carpizo".
Ha habido una actitud muy grave de desvío y ocultamiento
en el caso, y hasta dónde llega la complicidad, eso lo demostrará
la propia PGR, dijo.
El ex funcionario jalisciense remarcó que hubo
"un tercer grupo opositor en el aeropuerto de Guadalajara el 24
de mayo de 1993", lo que "está quedando cada vez más claro".