El primer ministro indio suaviza su discurso
Pakistán se declara "en pie de guerra"; disparos en Cachemira
REUTERS, DPA Y AFP
Islamabad, 23 de mayo. Pakistán anunció hoy haber puesto en pie de guerra a su capital, al aumentar las tensiones con India, por lo que canceló todos los permisos a los empleados gubernamentales y ordenó a voluntarios de la defensa civil que asistan a cursos de primeros auxilios y de bomberos.
Al mismo tiempo, el gobierno de Pervez Musharraf le hizo saber a la Organización de Naciones Unidas (ONU) que se propone repatriar a sus tropas que participan en la misión de paz en Sierra Leona, y confirmó que hará otro retiro parcial en su frontera con Afganistán, para concentrarlas en la zona fronteriza oriente con India.
Si bien el presidente Musharraf advirtió que su país responderá militarmente a cualquier agresión de la nación vecina, el primer ministro indio Atal Behari Vajpayee suavizó su retórica -luego de que la víspera pidió a sus tropas prepararse para "la victoria"- al señalar ahora que veía los cielos despejados y que sólo esperaba que no se produzca ningún "relámpago".
Mientras Vajpayee estaba por concluir una gira de tres días por la Cachemira india, la tensión seguía creciendo en la frontera con disparos de la artillería de su país en la zona en disputa. Incluso se reportó que cuatro paquistaníes murieron y varios más resultaron heridos ante disparos de soldados de India en la región de Cachemira y la provincia de Punjab.
Reportes de la televisión en Nueva Delhi señalaron que en los días anteriores al menos tres pueblos indios han sido incendiados en la frontera, y en contraposición unos 50 pueblos paquistaníes han sufrido ataques, lo que está provocando la huida de cientos de residentes. Tanto India como Pakistán han movilizado hacia la región en conflicto alrededor de un millón de soldados. Sin embargo, el gobierno de Vajpayee cuestiona las promesas de Pakistán de no permitir acciones terroristas desde su territorio de los separatistas de Cachemira. "Las promesas hechas en el pasado no fueron cumplidas", dijo.
El canciller paquistaní, Abdul Sattar, instó a la ONU a aconsejar a Nueva Delhi que "elija el camino del diálogo para resolver la situación", y aseveró que de su parte hay disposición a cooperar en cualquier esfuerzo internacional al respecto.
El secretario general de la ONU, Kofi Annan, llamó a su vez a Musharraf a que adopte medidas concretas para detener los actos terroristas de separatistas musulmanes en la línea de control que divide a la Cachemira controlada por India y Pakistán.
El canciller británico, Jack Straw, afirmó que "hay riesgo de una guerra nuclear" entre los dos potencias asiáticas.