Empieza asamblea mundial en la materia; impulsar inversiones y acciones por la niñez, retos

La salud, esencial para la seguridad humana: OMS

Se buscará promover medidas sanitarias en casos de conflictos como en Palestina: Gro Harlem

KYRA NUÑEZ CORRESPONSAL

Ginebra, 13 de mayo. La salud es indispensable para la seguridad humana, y su defensa ha rebasado los círculos profesionales sanitarios para incluir al sector privado, al mundo del "estrellato" y a líderes de opinión en el consenso de que "a menos que toda la población goce de salud, no habrá crecimiento económico, ni estabilidad, ni dignidad humana, ni disfrute de los derechos humanos, y tampoco habrá paz", expresó la directora de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Gro Harlem Brundtland.

La 55 Asamblea Mundial de la Salud inició una semana de trabajos en medio de la precaria situación en los territorios palestinos ocupados y el rechazo al ingreso de Taiwán.

Brundtland opinó sobre la situación en los territorios palestinos ocupados y condenó los ataques deliberados contra civiles "dondequiera que ocurran". Afirmó que "la crisis en esas zonas es una muestra de lo que puede ocurrir cuando el sistema de salud y el resto de la infraestructura necesaria para vivir se colapsa a consecuencia de un conflicto". La situación sanitaria de la población en los territorios árabes ocupados, incluida Palestina, y la asistencia prestada por la OMS serán objeto de examen.

El personal de la OMS, así como el suministro y distribución de medicamentos a la población palestina, han sido obstaculizados por Israel, lo que ha servido de argumento para que el organismo se aboque a promover en el mundo la adopción de medidas excepcionales de salud en las situaciones de emergencia y de crisis, mencionó Harlem.

Rechazo al ingreso de Taiwán

El ingreso de Taiwán, demandado en esta ocasión como "observador", no logró pasar ante la mayoría de los 191 estados miembros, muy a pesar de una intensa campaña respaldada por Estados Unidos y por varios países de la Unión Europea.

La doctora Brundtland en su discurso inaugural hizo un reconocimiento al nuevo impulso dado al campo de la salud con nuevas inversiones, como resultado de la Conferencia Internacional sobre la Financiación para el Desarrollo, realizadaen marzo en Monterrey.

La Asamblea Mundial de la Salud es el órgano rector de políticas y dirección de la OMS; desde esta tarde en que fue inaugurada, y hasta el viernes 18, deberá promover mayores inversiones en salud como elemento para el desarrollo económico, una estrategia específica para la última parte de la campaña para la erradicación de la poliomielitis, y valorar la contribución de la OMS a las metas del milenio para el desarrollo.

A la asamblea asisten los ministros de salud de 191 países como Afganistán; de México destaca la asistencia del secretario de Salud, Julio Frenk Mora, invitado de honor como conferencista del tema Uso deliberado de agentes biológicos y químicos, programada para mañana.

El mundo sigue viviendo una situación frágil en la que 6 mil millones de personas viven, la mayoría, en medio de una peligrosa escasez de víveres, agua y de seguridad, y una minoría de ricos que sufren porque consumen demasiado. Todos enfrentan el grave peligro de perder la salud, advirtió la directora de la OMS, por lo que es necesario enfrentar tanto las enfermedades de la pobreza como las de la riqueza.

De la temática de la 55 Asamblea Mundial de la Salud, la directora de la OMS destacó la situación de la infancia y dio a conocer que en septiembre próximo, durante la Cumbre Mundial sobre el Desarrollo Sostenible, en Johanesburgo, Sudáfrica, lanzará la iniciativa para promover los entornos saludables para los niños que, entre otros cosas, servirá de apoyo para adoptar medidas basadas en la experiencia a nivel comunitario.

Brundtland delineó igualmente otras áreas de trabajo que serán revitalizadas, como aquellas relacionadas con la dieta, la inocuidad de los alimentos y la nutrición humana; la expansión de la campaña "Por tu salud, muévete"; proseguir la negociación del convenio marco para le control del tabaco y del alcohol, que ha aumentado considerablemente desde 1990; la promoción del financiamiento de la atención sanitaria, y la mejoría de los recursos humanos en los sistemas nacionales de salud.

Asimismo, aumentar el número de personas que pueden acceder a tratamientos como los antirretrovirales y ampliar los programas de prevención, mejorar la capacidad para medir las repercusiones de las intervenciones en la salud de la población pobre, y aumentar el acceso a los medicamentos esenciales y las tecnolo-gías sanitarias.

La asamblea deberá pronunciarse sobre no menos de 16 proyectos de resolución relativos al régimen alimentario, actividad física, respuesta mundial de salud pública al uso deliberado de agentes biológicos y químicos, ataques nucleares, seguridad del paciente, y accesibilidad de los medicamentos esenciales. Además, sobre la salud de las poblaciones indígenas en el mundo.

Y una celebración: el centenario de la Organización Panamericana de la Salud. Por cierto, el entorno de la 55 Asamblea Mundial de la Salud está siendo beneficiado para la promoción de los candidatos a dirigirla, entre ellos el doctor Jaime Sepúlveda Amor, quien participa en los trabajos en Ginebra como asesor de la delegación presidida por Julio Frenk.

Por cierto, la delegación mexicana, de 19 integrantes, cuenta con la participación de tres diputados del PRI, dos del PAN y una del PRD.

"Escaso presupuesto para investigación"

Por otra parte, el Foro Global para la Investigación en Salud se quejó hoy que se destine apenas un 10 por ciento de los 7 mil 300 millones de dólares en la investigación en salud para 90 por ciento de los problemas en esta materia a nivel mundial.

Su presidente, Richard Feachem, indicó que ese 10 por ciento tiene un destino desigual: la investigación se destina a las enfermedades de los países industrializados del Norte, mientras que aquellas de las poblaciones del Sur apenas son objeto de atención siempre y cuando tengan repercusión en las sociedades ricas, como son la malaria, la tuberculosis, la tripanosomiasis (enfermedad del sueño) y la leishmaniosis.

El organismo insistió en que "sin adelantos en el campo de la salud y el desarrollo, no habrá seguridad mundial, y los países industrializados tendrán que hacer frente a las consecuencias de los desastres generados por los humanos, los cuales hubieran podido ser evitados".