"Se está complicando" el diferendo por el manejo de recursos hídricos del río Bravo

Davidow: preocupante, que México no cumpla con sus obligaciones de entrega de agua a EU

Asegura que en su país están garantizados los derechos de los trabajadores migratorios

ROSA ELVIRA VARGAS Y RICARDO OLAYO

Es "preocupante" que el gobierno de México no esté cumpliendo con sus obligaciones de entrega de agua a Estados Unidos de acuerdo con lo que señalan los tratados bilaterales en la materia, declaró el embajador de ese país, Jeffrey Davidow.

"Nosotros estamos haciendo lo que debemos de acuerdo con esos tratados y México no; ese es un tema de gran preocupación'', puntualizó. Puso de relieve el supuesto incumplimiento de esos acuerdos, no obstante que la obligación mexicana consiste en entregar cuatro veces menos líquido del que recibe de Estados Unidos.

Al asistir junto con el jefe del gobierno capitalino, Andrés Manuel López Obrador, a la colocación de la primera piedra del Hospital Shriners para niños en Santa Ursula, al sur de la ciudad, el representante de Estados Unidos insistió en que el problema de entrega recíproca de agua del río Bravo "se está complicando".

El problema, abundó, es que existen varios tratados en cuanto al agua "y Estados Unidos siempre ha cumplido con sus obligaciones. En los últimos diez años México ha entregado, según sus obligaciones, menos de la mitad" del líquido que le correspondía. Este hecho, añadió, ha generado ya un gran problema con los agricultores de Texas.

Dijo que comprendía que también existe por ese motivo un problema en el norte de México, pero lo cierto es que el país "no ha cumplido con sus obligaciones conforme a los términos del tratado".

Davidow fue interrogado una vez más sobre la resolución de la Corte Suprema de Estados Unidos que vetó los derechos laborales y de asociación a un mexicano indocumentado. El diplomático aseguró que ese fallo es distinto de como se ha interpretado en México.

Consideró que se trata sólo de falta de información sobre el punto, no obstante que el propio presidente Vicente Fox expuso la queja apenas la semana pasada ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos y que desde todos los sectores sociales y laborales se ha reiterado la denuncia.

"Lo he explicado antes y lo repito: el fallo de la Corte Suprema de ninguna manera quita a los trabajadores indocumentados sus derechos laborales en Estados Unidos, y tienen muchos derechos laborales allá. El fallo fue mucho más estrecho. Puedo asegurarle al pueblo y al gobierno de México que los trabajadores migratorios, con o sin documentos, están protegidos por la ley estadunidense, que en este sentido es bastante fuerte y eficiente."

Tampoco limita esa determinación judicial, dijo Davidow, la posibilidad de asociación -ya sea para formar o pertenecer a un sindicato- para los indocumentados.

Dio su versión de cómo surgió ese fallo: una empresa despidió a un indocumentado y las autoridades judiciales de Estados Unidos y la propia Casa Blanca empezaron un juicio en contra "y ganaron". Se impuso un elevado castigo contra la compañía y una parte de esa sanción se llevó a la Corte Suprema, que decidió "que no era prudente o no era legal esa parte del castigo".

Aseguró que la ley estadunidense que protege a quienes intentan formar un sindicato "es muy fuerte, una de las más fuertes, diría yo, en el mundo".

-ƑQuiere decir que no se ha entendido ese fallo?

-Creo que ha habido falta de información y quizá por ser un tema muy delicado, cuando eso ocurre siempre hay posibilidades de mala interpretación.

Davidow indicó que como resultado de las conversaciones recientes entre los presidentes Fox y George W. Bush aumentarán los contactos de alto nivel para tratar el problema migratorio, aunque en la llamada escala técnica "jamás lo hemos interrumpido".