No pido un lugar para mí, pero muchos
jóvenes esperan la oportunidad, señala
Hay futbolistas mexicanos mejores que Caballero, dice
Luis Hernández
Lapuente recordó el caso del arquero Quiroga,
a quien acusaron en Perú de venderse en el Mundial 78
MIGUEL ANGEL RAMIREZ
El delantero Luis Hernández se inconformó
con la convocatoria de Gabriel Caballero a la selección nacional:
"hay mejores jugadores en México, y los mexicanos también
tenemos que hacer algo".
Agregó:
"si bien aporta algo a la selección, qué bueno, pero para
uno, como mexicano, es muy molesto."
Aseguró que no se incluía entre los mexicanos
que merecían esa oportunidad.
"Yo no pido una oportunidad ni nada de eso. Yo sigo tranquilo
y lo que hice, lo hice muy bien. Creo que lo hice muy bien, no soy yo para
juzgarlo, pero hay muchos chavos que se forjaron desde muy chicos
y esperan la oportunidad de ir a un Mundial, y el hecho de que venga un
argentino y le den un lugar, pues a mí no se me hace que no".
-¿Te sorprendió la nominación de
Caballero?
-No; se han manejado cosas en el futbol que ya no me sorprenden.
Rechazó que la nominación fuera una falta
de respeto para el futbol nacional. "Porque él es un buen jugador,
pero sin duda hay buenos jugadores de México".
Ignorado por Javier Aguirre, el futbolista no cree que
sus comentarios disminuyan sus posibilidades del ir a la Copa del Mundo
de 2002. "Expreso lo que siento como mexicano y no tengo reparo en decirlo.
Tengo mi mente tranquila, todo muy bien y eso me da la razón para
decir eso".
Confesó que si llega la nominación "qué
bueno, pero estoy contento" porque el futbol le ha dado muchas cosas "y
me conocen en todo el mundo".
Germán Villa, otro americanista que ha sido seleccionado,
dijo que no deseaba hacer ningún comentario sobre el llamado de
Caballero; mientras el técnico Manuel Lapuente calificó el
tema como "sumamente delicado".
Puntualizó que como jugador no tenía nada
que decir de Caballero. Además recordó que todos los mexicanos
tienen derecho a ser convocados. Sin embargo, explicó que es delicado,
"porque han habido situaciones que son muy conflictivas. Este es un problema
afectivo". De ninguna manera es xenofobia.
Puso como ejemplo el caso "del portero de Perú,
Quiroga", quien se naturalizó "y le echaron la culpa", pues supuestamente
se vendió cuando Argentina (su país natal) le metió
seis goles en el Mundial 78. "Primero estaban muy contentos con él
y luego siempre fue el chivo expiatorio.
"O sea -agregó- la responsabilidad para el chamaco
es demasiado fuerte porque implica, en primer lugar, un sacrificio extra,
que es ir a la selección. Ahí no hay remuneración
económica, ahí o sube tu prestigio o te hundes".
Consideró que representa un sacrifico extra, pues
son más partidos, más concentraciones. "Entonces implica
algo interno, muy profundo; se debe hacer una reflexión de qué
tantas ganas tengo de ir a la selección y tener muy claro si estoy
dispuesto a todo sacrificio".
Dijo que la idea no es sacrificarse con tal de ir una
copa del mundo, como lo han mencionado algunos jugadores extranjeros. "Yo
me naturalizo para ir a un Mundial. No, no se trata de ir a ganar la Copa.
Si no se puede, es otra cosa, pero esa mentalidad implica un sacrificio
extra por mi patria.