Confían pueblos indios que tome en cuenta
derechos históricos al resolver controversias
Exigen a la Corte fallo en favor de indígenas
"Debe demostrar que es autónoma de los poderes
Ejecutivo y Legislativo", señalan en foro
ROSA ROJAS ENVIADA
Oaxaca, Oax., 23 de febrero. La Suprema Corte de
Justicia de la Nación (SCJN) deberá tomar en cuenta, a la
hora de resolver las controversias contra la reforma constitucional en
materia indígena, que la decisión que va a tomar es sobre
derechos históricos de los pueblos indios, que ya existían
antes de la formación del Estado mexicano, "por lo que deberá
fallar en favor de los indígenas", se planteó aquí
durante el Encuentro Nacional de Autoridades Los pueblos indígenas
ante la Corte.
Este día, en 10 mesas de trabajo y dos plenarias,
las autoridades indígenas y algunos integrantes de organizaciones
sociales reflexionaron sobre el papel que está jugando la SCJN y
el que deberá asumir para hacer justicia a los pueblos indios del
país.
Se plantearon varias posturas contrapuestas: una, optimista,
que confía en que los ministros "actuarán imparcialmente
y fallarán para invalidar la reforma constitucional impugnada, porque
tenemos la razón". Otra, que no quiso definirse "pesimista", "si
no, no estaríamos aquí", apunta: "los ministros son parte
del sistema".
Una más acotó: "nosotros esperamos que la
Suprema Corte asuma su papel; lo ideal es que haga justicia, pero es parte
del mismo sistema, y si no hacemos presión los que estamos de acuerdo..."
Otra
voz afirmó que "la Suprema Corte es nuestra última instancia.
La vemos difícil, pero sí esperamos que nos dé la
razón, porque la hay; si no, se va a echar una bronca con todos
los pueblos y las comunidades indígenas, que nos vamos a unir para
reclamarle por qué no revocó la reforma".
Una más añadió: "aquí es donde
tenemos que ponernos de acuerdo y estar pendientes de qué vamos
a hacer, tanto si la Corte falla a favor como si lo hace en contra; hay
que enlazarnos más, ponernos de acuerdo" .
En otra parte se afirmó: "la SCJN se ve liberal
en sus discursos, pero tiende a tener actitudes conservadoras, no ha hecho
resoluciones progresistas".
En todas las mesas se planteó que la Suprema Corte
"debe demostrar que es autónoma e independiente de los poderes Ejecutivo
y Legislativo, asumiendo con responsabilidad y congruencia su papel; ser
imparcial; recurrir a las fuentes históricas y acercarse y conocer
la vida de las comunidades, así como dar a conocer cuál es
su función, porque muchos ni siquiera saben que existe la SCJN".
Al encuentro llegaron más de 150 participantes,
en su mayoría indígenas, provenientes de Veracruz, Morelos,
Chiapas, Puebla, Chihuahua y Distrito Federal. Son nahuas, mixes, mixtecos,
zapotecos, tzeltales, tzotziles y choles.
En todas las mesas, los participantes criticaron el hecho
de que en la aprobación de la reforma constitucional impugnada "no
se consultó a los pueblos ni a las comunidades mediante las asambleas,
que son el órgano máximo de decisión".
Cuando mucho, y ya por la presión de los pueblos
y las organizaciones, se hicieron algunos foros, por ejemplo en Chiapas,
en algunas cabeceras municipales. Sin embargo, "una consulta no significa
un foro en el que no se da información a profundidad, bien explicada,
con ejemplos concretos para que la gente entienda qué va a pasar
con la reforma".
Se mencionó que el gobernador de Veracruz, Miguel
Alemán, "que quiere parecer muy democrático y muy moderno,
hizo un plebiscito, pero se preguntaron cinco cosas y no hubo información
suficiente, sino poca y manipulada. Entonces, si a la gente le preguntan,
¿estás porque se legisle a favor de los pueblos indígenas?,
pues va a decir que sí, pero no se le explica que, por ejemplo,
en lo que se refiere a la tierra, de acuerdo con la reforma aprobada si
una persona se apoderó de tierras de la comunidad y sembró
15 mil manzanos, esa gente ya no va a devolver el terreno".
Además, el gobierno de Veracruz, agregaron, utilizó
el plebiscito para promover la Cumbre de Tajín, "que sólo
beneficia a grandes empresas turísticas y utiliza nuestros centros
ceremoniales y no los respeta. Promueve leyes, y unas veces consulta y
otras no, y ahora informó que va a impulsar la modificación
de leyes para adecuarlas a la reforma indígena impugnada".
Los participantes plantearon en las mesas que es necesario
convocar a una gran consulta, luego de una serie de asambleas donde se
vierta la información en la que se explica a la gente "cómo
se discute el estatuto comunal".
Agregaron que "si los diputados se supone que son nuestros
representantes, debieron hacer la consulta en sus distritos e informar
a los municipios y comunidades, para no determinar sin habernos consultado".
Afirmaron también que deben detenerse los procesos
de modificación de leyes secundarias, hasta que la SCJN emita su
fallo sobre las controversias, y entonces se vuelva a la aprobación
de la iniciativa de la Cocopa.
Con relación a los conceptos de tierra, territorio,
autonomía y libre determinación, entre otros, se señaló
que aunque aparentemente están incluidos en el texto de la reforma
aprobada por el Congreso, en realidad fueron excluidos. No se reconoció
el derecho de los pueblos al usufructo de los recursos naturales que están
en sus terrenos, e incluso el territorio de muchos pueblos indios "está
amenazado por los proyectos del Plan Puebla-Panamá.
"No hay autonomía si no se reconocen nuestros propios
sistemas normativos y nuestro territorio. No somos sujetos de derecho;
no somos actores principales; no tenemos voz ni voto en ninguna instancia;
seguimos siendo considerados gente de segunda", afirmaron.
"Los pueblos indios debemos juntarnos más, conocer
nuestras demandas y hacer movilizaciones, si es necesario. Hay que estar
preparados y decidir qué vamos a hacer, tanto si la Suprema Corte
falla en favor de las controversias nuestras como si los hace en contra",
concluyeron