Buenos Aires puede contar con Berlín
en esta "difícil situación", afirmó
Pide el canciller Schroeder al presidente Duhalde abandonar
medidas proteccionistas
Protagonizan miles de argentinos un nuevo cacerolazo
contra la política del gobierno
REUTERS, AFP Y DPA
Buenos Aires,15 de febrero. El canciller federal
de Alemania, Gerhard Schroeder, dijo este viernes ?tras una reunión
con el presidente Eduardo Duhalde? que Argentina debe dejar de lado las
políticas proteccionistas y tomar las medidas esperadas por la comunidad
mundial para que simultáneamente el Fondo Monetario Internacional
(FMI) le preste su ayuda.
Así,
el jefe de gobierno alemán llamó desde Buenos Aires al FMI
a prestar ayuda a Argentina a medida que avance en su plan económico,
al tiempo que aseguró que el Grupo de los Siete (G-7, las naciones
más desarrolladas del mundo), respalda a este país, sumergido
en su peor crisis de las últimas décadas.
Schroeder aseguró que Argentina puede contar con
Alemania en "esta extraordinaria y difícil situación", aunque
no dará ayuda financiera, pero propuso al FMI otorgar la asistencia
en función de la realización del plan económico paso
a paso.
"Tenemos que evitar el círculo vicioso en el que
una parte requiere una concepción de saneamiento para prestar ayuda
y la otra parte espera la ayuda para tomar medidas", destacó el
canciller en una rueda de prensa conjunta con Duhalde.
Agregó que lo que se debe hacer es empezar a realizar
las medidas iniciadas, y si-multáneamente prestar este apoyo y la
asistencia paso a paso".
Pero también advirtió contra eventuales
medidas proteccionistas en la política económica argentina
ya que, dijo al término de una breve visita a Argentina de menos
de 24 horas, el proteccionismo no es una receta para resolver la crisis.
Luego de lo anterior, Duhalde declaró que Schroeder
ha demostrado ser un amigo de Argentina, y agregó: "Vino en un mo-mento
difícil y sabemos que va a hacer todo lo posible por ayudarnos".
En otra parte de su visita, Schroeder recibió a
familiares de desaparecidos alemanes durante la dictadura argentina, y
sobre este asunto Duhalde dijo que su gobierno analizaría cualquier
pedido de extradición alemán contra militares argentinos
acusados de la desaparición de ciudadanos de ese país.
El portavoz presidencial, Eduardo Amadeo, entre tanto,
desmintió versiones periodísticas que afirmaban que los depósitos
bancarios en dólares destinados a la compra de automotores o inmuebles
serían convertidos a pesos en una relación uno a uno en lugar
de 1.40 por dólar, como se había anunciado anteriormente.
En Nueva York el presidente del Banco Central de Argentina,
Mario Blejer, anunció que su país lanzará el lunes
medidas que ablandarán el corralito, que impide a los argentinos
disponer de sus depósitos.
En una conferencia celebrada en el Consejo de las Américas,
Blejer explicó que las nuevas medidas permitirán a los argentinos
efectuar compras de casas, automóviles u otros activos registrables.
Añadió que también se podrán
cancelar deudas y transferir depósitos de un banco a otro, pero
con una cláusula por la cual el banco receptor deberá asegurar
un encaje de 100 por ciento del total transferido, además de que
se buscará compensar con bonos la diferencia causada al pesificar
los depósitos de un dólar a 1.40 pesos y al pesificar
las deudas de un dólar a un peso.
Pero pese al apoyo recibido por Schroeder y las medidas
anunciadas por Blejer, Argentina vivió otro día de manifestaciones
cuando un grupo de ahorristas reclamó frente a los bancos del centro
de esta capital la devolución de sus depósitos, lo que concluyó
en disturbios luego de que la policía intentó contener a
los manifestantes.
Otras manifestaciones con diversos reclamos se siguen
llevado a cabo en varios puntos del país. Precisamente el gobierno
de la provincia de Córdoba expresó su preocupación
por los desbordes sociales registrados en ese distrito en los últimos
días.
Mientras, unos 500 desocupados que bloquearon durante
cinco días los accesos al Polo Petroquímico de Dock Sud (donde
tienen plantas varias empresas petroleras) en reclamo de alimentos y trabajo,
levantaron su medida tras una intimidación judicial.
Cerca de la medianoche miles de militantes de izquierda,
sindicalistas y vecinos protagonizaron un nuevo cacerolazo en la
Pla-za de Mayo, frente a la presidencial Casa Rosada, en rechazo a la política
económica gubernamental y contra el corralito.
Finalmente, mientras el gobierno acordó con la
industria farmacéutica conformar una canasta básica de medicamentos
económicos que cubra 80 por ciento de las necesidades, Chile envió
una primera partida de 65 toneladas de insumos hospitalarios para ayudar
a paliar la escasez de este tipo de productos.