La unión de autores, saldo favorable: experto

Si algo bueno está surgiendo de lo que votaron los legisladores en materia de nuevos impuestos es la unión de los autores, expresó en entrevista José Luis Caballero Leal, especialista con más de 15 años en materia de propiedad intelectual y que ha llevado casos de plagio interpuestos por compositores como Marcos Lifshitz, quien se dice robado en una de sus composiciones por Juan Carlos Calderón, Warner Music y Luis Miguel.

"El tema se podría reducir al hecho de que en los últimos 70 años los creadores e intelectuales, en general, habían venido siendo exentos de pagos en impuesto sobre la renta, lo que les había permitido compensar la nula intervención del Estado para entregarles incentivos de ninguna naturaleza por sus aportaciones de índole estrictamente cultural.

"Si bien es cierto que dicha exención durante los últimos 10 años fue objeto de una serie de importantes limitaciones, que a la postre sólo acabó beneficiando a los escritores de obras literarias, a los compositores de obras musiciales, a los fotógrafos y a los caricaturistas, también lo es el hecho de que los creadores, en su inmensa mayoría, lograron, derivado de la desigualdad y la falta de equidad en la medida, ampararse y seguir siendo beneficiados por la exención total respecto de sus ingresos".

Que dicha actividad de los creadores haya sido gravada de un día para otro por el Congreso de la Unión, con base en una iniciativa del Ejecutivo, provocará que se dé una disminución de bienes culturales, precisó el abogado.

Otro aspecto que molesta a los creadores es la limitación sobre la explotación de su patrimonio: "El Estado reconoce los derechos de autor al permitir a éste el uso de su obra por toda su vida y por 75 años después de su muerte. Una vez que transcurre ese plazo la obra cae en lo que se denomina del dominio público; es decir, se incorpora al patrimonio de la sociedad, la cual puede emplear, usar y explotar esa obra sin necesidad de pedir autorización y de pagar cualquier cantidad derivada del uso.

"La exención fiscal era una compensación, pero no es un argumento determinante. No deja de ser una causa más que se abona a las múltiples expresadas en los últimos días", agregó. "Podrían presentarse amparos, pero la realidad es que no hay materia de amparo. Dentro de la ley del impuesto sobre la renta no hay un trato diferenciado a los autores; por cuanto hace a la exención fiscal, la materia de amparo no existe. Es decir, los impuestos deben ser proporcionales y equitativos. Inequidad es cuando unos cuantos se benefician respecto de los demás. Hoy, la ley del impuesto sobre la renta indica que todos los autores pagan impuestos. Punto. No hay contra qué ampararse. No hay trato inequitativo". ARTURO CRUZ BARCENAS